Luis García
“El poder no cambia a las personas, sólo revela quiénes verdaderamente son”
PEPE MUJICA
Hoy no voy a hablar de los sucesos diarios de la vida pública de la entidad, quiero recordar la historia reciente que vivimos miles de tabasqueños de todos los estratos sociales, 27 de octubre del 2007 y los días que siguieron. Recordar a los héroes anónimos que estuvieron apoyando en el día a día para evitar que el centro de la ciudad se fuera a pique, como decíamos antes, cosa que al final se vio frustrado porque la fuerza del agua que venía procedente de la sierra chiapaneca y tabasqueña hizo que se desbordará el río Grijalva desde Teapa, Jalapa y Centro. Aunado a ello el Viejo Mezcalapa que había estado “dormido”, por así decirlo, despertó debido a todo el caudal que recibió del Alto Grijalva en la parte que corresponde a la zona de Huimanguillo. Recordemos que existen dos ramales donde se forman el Viejo Mezcalapa y el Río Samaria, donde también los municipios de Cunduacán, Jalpa, Nacajuca y Comalcalco se vieron afectados por los grandes caudales de agua procedente del Alto Grijalva. La entidad se encontraba en una situación deplorable en todos los sentidos, de los 17 municipios 13 estaban afectados por las lluvias de ese año. Las autoridades si bien es cierto le pusieron todas las ganas para solucionar la situación, la realidad es que no había nada que hacer el agua se había apoderado del territorio tabasqueño y solo quedaba llevar los apoyos a miles de familias que se encontraban entre el agua. Recuerdo como se tuvieron que ir a vivir a albergues de la ciudad, como el de Galerías, la propia Universidad Juárez, el viejo Casino del Pueblo y muchos más que ahora no recuerdo. Los que nos dedicamos a dar información de manera diaria, nos encontrábamos en la disyuntiva de dar información o de apoyar a nuestras familias que tuvieron que salir de sus casas. Es más, muchos periódicos tuvieron que parar sus actividades por el simple hecho de que su personal estaba afectado. Otros más se fueron al agua y en las radiodifusoras sus plantas de energía habían sido igual anegadas y tuvieron que suspender trasmisiones. Sólo unas cuantas radiodifusoras y televisoras estuvieron transmitiendo de manera permanente entre estas tenemos que reconocer el trabajo que realizó por ejemplo la CORAT, la televisora tabasqueña quien desde muy temprano hasta muy noche era trasmitir todo lo que sucedía. Ahí la televisora de Dios dejó de serlo para convertirse en lo que realmente debería de ser. Mientras que los hoteles se vieron rebasados en sus ocupaciones, claro, los que no se habían ido al agua. Pero además sufrieron terriblemente, funcionaban a menos del 50% porque su personal se encontraba igual afectado y por más que quisieran ir a trabajar no podían llegar a la ciudad. La locura se hacia presente en muchos aspectos de la vida económica de la entidad, tardamos muchos años para recuperarnos, pero en la mente, en la psicología del tabasqueño, aún no hemos salido adelante y cada vez que nos anuncian un año con fuertes lluvias y frentes fríos, el temor vuele hacerse presente…Por hoy es todo…