Felipa Nery
Tabasco no sale de la caída estrepitosa que ha venido registrando en los últimos años. Por todos lados la gente se queja de la crisis económica, del desempleo, del cierre de sus negocios, de la inseguridad, y no es para menos; esas quejas no se deben sólo a una percepción de la realidad que se vive, que uno puede observar al acudir a los super mercados, a un restaurante, donde hay poca concurrencia, o al cargar gasolina, que los automovilistas no llenan el tanque, sino sólo le ponen 200, 300 y algunos hasta 100 pesos, que se le termina en recorrer unos cuantos kilómetros. El pasado fin de semana se registraron lluvias intensas que provocaron encharcamientos en distintas colonias populares, como siempre, los más amolados sufren las consecuencias, tal y como ocurrió en el 2007, donde miles de personas se empobrecieron de la noche a la mañana a causa de esa inundación que provocó más de 30 mil millones de pesos en pérdidas, según la CEPAL, de la cual la entidad no se repone y sigue acarrando miseria y pobreza, porque también muchos negocios jamás volvieron a abrir sus puertas. También después del 2014 nos empezó a afectar la caída del precio del petróleo; a pesar de que se dijo que con la reforma energética estaríamos mejor, resultó todo lo contrario, desde esas fechas, Tabasco se enfiló a ocupar los primeros lugares en desempleo, que a la fecha se mantienen en sus niveles máximos, que supera los 8 puntos porcentuales; eso mismo ha sido una de las causas por las que Tabasco ocupa primeros lugares de inseguridad en muchos rubros, robos a transeúntes, robo a casa habitación, violación, secuestro, los homicidios dolosos y feminicidios, la extorsión, según el reporte que presenta Observatorio Ciudadano Tabasco, sobre la incidencia delictiva enero-septiembre, con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, con corte al 20 de octubre; el único punto donde hay buena noticia en materia de seguridad, es en el combate de trata de personas que prácticamente se ha desterrado en la entidad, después de traer altísimos porcentajes en 2018, el delito que también ha disminuido, es el robo de vehículos, aunque somos el sétimo lugar a nivel nacional y la mayoría son robos con violencia; en el asunto del narcomenudeo, Tabasco aparece en los últimos lugares a nivel nacional, pero en comparación con el año anterior, se reporta un incremento significativo en Tabasco en este año, al pasar de un acumulado de 85% a 106%; con respecto al abigeato, si bien se reporta una disminución en este delito, somos el primer lugar a nivel nacional; en cuanto al problema de violencia familiar, tampoco andamos nada bien, ocupamos el sexto lugar a nivel nacional y comparado con el año anterior, el reporte de incremento de casos es de 4 mil 970 casos a 5 mil 709; los focos rojos están encendidos en Tabasco, desde hace muchos años y no hay perspectiva de que estos números cambien, porque la crisis económica es nacional y también internacional, así es que hay que sacar el ingenio, para sobrevivir en esta época de altos índices de violencia y crisis económica.
