Luis García
Mucha polémica provocó la forma en que candidatos del Partido Acción Nacional quisieron llevar agua a su molino y llegaron hasta donde se encontraban familiares de personas fallecidas o lesionadas por el terrible accidente que ocurrió en la Línea 12 del Metro. No son tiempos de querer medrar con el sentimiento de los ciudadanos, sino de apoyarlos, de ser empáticos con todos, de que sirve ir a presentar una denuncia en contra de tal o cual funcionario, por el hecho de tener una posibilidad remota de un voto. No es de persona de bien, tratar de confundir a quienes con el dolor reflejado en el rostro buscan a su hijo, su esposo, madre, hermano. Insistirle para ir a un lugar a presentar una denuncia, la gente en ese momento no piensa en ello, sino encontrar a la persona amada. O cuando menos saber donde está. Las horas siguientes al accidente del metro (lunes 3 de mayo), fue de angustia para los familiares de las personas que iban en algunos de los dos vagones que se derrumbaron. Al momento de informarse de lo sucedido, decenas de personas se trasladaron, primero al lugar de los hechos y luego a los hospitales donde posiblemente se encontraba el familiar. Fueron horas de penurias, sin saber, otros más tuvieron la suerte de encontrarlos sanos y salvos. 25 personas fallecieron, algunos de manera inmediata, otros en los hospitales. México vivió momentos de dolor, de incertidumbre, de declaraciones en torno a que sucedió. El presidente por su parte fue claro al precisar que era necesario esperar los resultados de las investigaciones para poder fincar responsabilidades. Por cierto, ayer volvió a calificar a la prensa como tendenciosa, golpeadora, injusta, la más lejana al pueblo. Lo anterior porque los medios comenzaron a pedir responsables del accidente. Entre ello Marcelo Ebrard quien fue el que puso en marcha el proyecto de la Línea 12 del Metro. Piden además que se le aplique responsabilidad a la titular del Sistema Colectivo Metro, Florencia Serranía Soto, misma que fue protegida por la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum. Muchos posibles responsables, ninguno será culpable…
DE SALIDA. Reproduzco un breve texto de Carlos Eduardo Garduza, alumno de Comunicación de la UJAT de la materia de Periodismo de Opinión, que me pareció interesante sobre lo que sucedió en la Ciudad de México: “YA NO. Después de una cita con su novio, Nancy Lezama salió del cine; para un niño con padres separados, la custodia compartida puede ser agotadora, el día de Brandon Giovanni Hernández en casa de papá había acabado y el pequeño quiso volver con su madre; Melitón Velasco, junto con sus hijos Adán y Salvador, terminaron otra jornada laboral, en esta ocasión especial porque celebraban el Día del Albañil. Por la noche todos emprendieron el tan conocido viaje a casa abordando el convoy de la Línea 12. Aquel lunes sus familias los esperaban, nunca llegaron”…