Luis García
La jornada electoral que se efectuó ayer en seis estados de la República inicio tal como lo habíamos mencionado con actos de compra del voto en estados como Tamaulipas, Durango y Quintana Roo por parte, del partido en el poder federal. Mientras que en las demás entidades podría estar sucediendo lo mismo, pero no se logró concretar alguna denuncia o agarrarlos infraganti, recordemos que por eso se les llama mapaches porque actúan en la oscuridad de la noche.
Sin embargo, la jornada electoral transcurrió en aparente calma en cinco de los seis estados, pues en Tamaulipas, se presentó un serio incidente donde un grupo armado entró a una casilla para cerrar el lugar, pero además provocar pánico entre los que estaban dentro de la misma mesa electoral.
Importante precisar el caso del gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González quien al ir a emitir su sufragio fue entrevistado externando que las condiciones en que se desarrolló el proceso electoral son diametralmente distintas a las que él enfrentó como candidato por la coalición PAN-PRD en 2016. Dijo que ahora “no ha habido ningún tipo de presión, no ha habido intervención gubernamental como vivimos hace seis años”.
Pero al final al ser cuestionado sobre lo que viene para él, al término de su mandato, respondió “que aún no ha decidido su nueva posición, pese a que ha recibido invitaciones públicas y directas del presidente, Andrés Manuel López Obrador para sumarse al gobierno federal”.
Surgen dos preguntas: ¿entregó el mandatario su entidad a Morena? ¿Va a ganar Morena de calle en Quintana Roo con el apoyo del gobierno estatal? Todo indica que así será, las componendas se han dado de nuevo, “tú entregas el Estado y te vas a colaborar con nosotros en el gobierno federal”. Otro embajador en potencia o funcionario de primer nivel. Y si alguna entidad interesa a la federación es precisamente Quintana Roo para tener el control total del turismo y de todo lo que entra a esa entidad, hasta la situación de las drogas que esta tan fuerte sobre todo en Cancún y Playa del Carmen.
Para cuando está columna este en prensa ya sabremos si el partido en el poder se llevó las 6 de 6 o 4 de 6 o 5 de 6.
44 AÑOS Y LO QUE SIGUE
Comencé a los 15 años haciendo la limpieza del periódico Diario de Tabasco del cual era director en ese entonces Erwin Macario Rodríguez el gran maestro del periodismo, ya en ese momento era un reportero consolidado, era la época del gobernador Leandro Rovirosa Wade (1977-1982). Y el gerente era Juan José Hernández, no el Espía, otro, llegado del DF. El dueño era el papá de Marden Capetillo, del mismo nombre. Al poco tiempo el gobierno compra el periódico y liquidan a todos, hasta yo recibí un buen dinero que la verdad no se en que me lo gaste, pero se acabo.
Pero Dios me tenía amor como hasta hoy y ya había amarrado mi próximo trabajo. Entraba al periódico AVANCE-Tabasco por recomendación de “Doña Tola”. El AVANCE se encontraba instalado en una vieja casona sobre la calle Madero a la altura del mercado Pino Suárez, tenía varias ventanas, muy grande y sin rejas. Me contrataron como cobrador de suscripciones y luego de facturas de publicidad, pero a la vez por las tardes me capacitaban para ser parte del área de producción del periódico, pues el licenciado Ignacio Cobo González lo había comprado y el equipo de producción era todo nuevo, desde las primeras compugraphics en Tabasco hasta la rotativa Goss Community de tres cabezas nuevecita, una lindura.
Primero trate en el área de captura, troné porque no era rápido con mis manos, pero la suerte seguía conmigo, el joven que me hizo el examen era Roberto Cuitláhuac Villar que a la postre se haría uno de los mejores reporteros de policiaca del periódico Tabasco Hoy, me permitió entrar de ayudante de formador, estaba yo en mi “mole”, aprendí el oficio y llegue a ser formador titular, vaya ya era un fregonazo, claro yo sabía que me faltaba mucho, a penas esto iniciaba. Seguimos en la próxima entrega, de como conocí a Sánchez Arriola.
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