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Candidatos independientes, un experimento casi fallido

Candidatos independientes, un experimento casi fallido

José Martínez

La modalidad de las candidaturas independientes para la presidencia de la república quedó a deber. Lo que se esperaba como un escape para las personas que buscaban una nueva forma de gobierno, se vieron decepcionados con las figuras de Margarita Zavala y Jaime Rodríguez, mejor conocido como “El Bronco”.

Quienes en su momento miran con desconfianza a los partidos políticos y han expresado la frase: “no votaremos por más de lo mismo”, en franca referencia a lo político, a un mes con días de las elecciones, no pudieron encontrar esa fórmula para quedar satisfechos al momento de votar.

En la reforma electoral del año 2012 se aprobó la figura de “candidato independiente”, pero sólo en la de 2014 se acordaron las normas que abrieron el camino a los ciudadanos que aspiraban a una candidatura, pero no contaban con el respaldo de un partido político.

En la opinión pública, los independientes se posicionaron como una opción veraz y lejana a los partidos políticos. Según la encuesta de Parametría (2015), las figuras de los nuevos tipos de candidatos recibieron un 65% de aprobación entre la población.

A nivel local se buscarían cargos como gubernaturas, diputaciones locales o ayuntamientos y delegaciones. Si bien las elecciones de 2015 demostraron la capacidad de los candidatos independientes por hacer frente a los partidos, de los más de 7 mil cargos a elección popular, sólo 123 lograron su registro.

En su momento se pensó que estos personajes vendrían a refrescar el escenario político, sobre todo, quienes se apuntaron para la presidencia de la república, fueron 74 ciudadanos los que presentaron ante el INE su manifestación de intención para contender. Luego vino la depuración, y al final solo dos personas pudieron pasar los filtros, uno de ellos, recabar firmar, el tema controversial que dejó al descubierto que cientos de éstas tenían inconsistencias.

En el caso de Margarita Zavala, quien se bajó de la contienda hace unos días, siempre estuvo cuestionada por su falta de formación. Sin tener como antecedente algún cargo relevante, y aún así se atrevió a participar bajo duras críticas, las cuales se acrecentaron después del primer debate presidencial, aunque el clavo que selló su retiro fue una encuesta de Mitofsky, donde la ubicaba en el mes de mayo con apenas dos puntos, y además nunca se pudo quitar el sello panista ni los errores de su esposo, Felipe Calderón Hinojosa.

Jaime Rodríguez, el primer gobernador bajo esa modalidad, tuvo su mandato en Nuevo León, donde el balance lo ubica como un fracaso, y de manera curiosa, en sus declaraciones, nunca da como referencia la administración que gobernó.

Con un lenguaje que raya en lo soberbio y vulgar, El Bronco igual se mantiene en las encuestas con menos de diez puntos, lo que hace imposible que pueda ganar el pase directo a la presidencia de la república.

Aunque continúa en el proceso, se prevé que en el segundo debate vaya de nuevo contra Andrés Manuel López Obrador, su objetivo: ganar algunas milésimas.

 

HABERES

HOY será el segundo debate presidencial. Meade dice que son los más “chingones”, mientras Anaya hace round de sombra, porque busca darle un nocaut a López Obrador. AMLO sigue 20 puntos arriba del segundo lugar.