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Con la muerte de Miguel Palmer acaba tríangulo amoroso de “Bodas de odio”

Con la muerte de Miguel Palmer acaba tríangulo amoroso de “Bodas de odio”

Con la muerte de Miguel Palmer se acabó, también, el triángulo amoroso que en 1983 mantuvo al espectador mexicano pegado al televisor con el título de “Bodas de odio”, co-protagonizado por Christian Bach y Frank Moro.

En la historia original de Caridad Bravo Adams y adaptación de María Zaratini, se contaba la vida de una joven enamorada de un joven soldado, pero que era forzada por su madre a casarse con un hombre adinerado.

Ambientada durante el porfiriato, Bach (fallecida en 2019) lucía enormes vestidos, Moro (muerto en 1991) era con su uniforme militar tema en varias revistas de la época y Palmer (2021) se convirtía en el villano odiado.

Desde el intro, el productor Ernesto Alonso quien ya había tenido el hit de “El derecho de nacer” y preparaba “El maleficio”, decidió adentrar al público mostrando cuadros de la época que enseñaban, entre otros sitios, el Cerro del Tepeyac, el zócalo de la Ciudad de México, la Plaza de Santo Domingo y la vista del Popocatépetl y el Iztaccíhuatl desde alguna calle pobre.

Bodas de odio se estrenó en 1983, cuando México salía de un sexenio a cuyo presidente le gustaba la historia nacional y buscado incrementarla en los libros de texto; si alguien quería comprar productos estadounidenses debía irse a Tepito para buscarla como fayuca y era el momento en que el sello Hecho en México se encontraba en toda publicidad mediática.

Pero también el año posterior a una enorme devaluación, cotizándose el dólar a 24 pesos; con panaderías que sólo vendían leche si la gente se llevaba pan y con la delincuencia explotando en el transporte público, con ladrones abriendo con navajas las bolsas de pasajeros, sin que éstos se dieran cuenta.