Por: José Martínez
Hoy es celebrado el Día Mundial del Agua, un recurso natural necesario para preserva la vida en la tierra. Desafortunadamente en algunos países el líquido vital se ha convertido en una mercancía, pero además fuera del alcance de los más pobres.
El caso de Tabasco es el de un estado privilegiado que se encuentra en la parte baja de la cuenca de dos ríos importantes de México, como es el Grijalva y el Usumacinta, los cuales durante décadas han dado vida a los suelos de la entidad. Por Tabasco corre el 33 por ciento de toda el agua dulce de México.
Sin embargo, debemos recordar que los ríos Grijalva y Usumacinta nacen en el vecino país de Guatemala, y surcan tierras chiapanecas antes de llegar al estado para desembocar en el Golfo de México.
En su largo recorrido, estos afluentes van recogiendo las descargas de aguas residuales de pueblos y ciudades por donde pasa, así como de plantaciones agrícolas y de la actividad petrolera que se realiza cerca de sus márgenes.
Lamentablemente el agua que se vierte a dichos ríos tiene diversos grados de contaminación. Quienes no le dan tratamiento a sus aguas contaminadas basta con que paguen a Conagua no una multa, sino el “aprovechamiento de cuerpos de aguas nacionales para descargas de aguas residuales”. Esto se traduce en grandes ingresos para la dependencia federal, los cuales se deberían utilizar para la construcción de plantas de tratamientos de aguas residuales; sin embargo, tampoco es así.
De las más de cien plantas de tratamiento de aguas residuales existentes en Tabasco, la mayoría no funciona adecuadamente, por lo que las agua que se vierten a los cuerpos de aguas nacionales son de dudosa calidad y de contenido desconocido. En los casos extremos, las aguas se descargan tal y como se reciben, es decir, sin ningún tratamiento.
Ni qué decir de las descargas de particulares, las cuales son verdaderos actos de fe, ya que son las mismas empresas las que toman las muestras y las llevan a los laboratorios de su preferencia. Por supuesto, siempre están dentro de las normas.
Cabe mencionar que en ninguna situación la Conagua realiza análisis espejos, cuyo fin sea comprobar que lo dicho sea verdadero.
En este 2017, el tema del Día Mundial del Agua es: “Aguas residuales, ¿por qué desperdiciar agua?”, que nos invita a reflexionar sobre la calidad del vital líquido que se está regresando a los ríos y océanos una vez que pasa por nuestras casas, por nuestra fábrica y la ciudad.
El agua que se contamina es la que después de su ciclo natural regresará a las viviendas para su uso diario, y al quererla potabilizar se deberán realizar cada vez mayores esfuerzos económicos y técnicos. Hacer el agua adecuada para el consumo humano resulta cada vez más caro…porque está cada vez más contaminada. Al contrario de los permisos que la Conagua entrega a ciertas empresas para extraer agua subterránea a precios irrisorios.
Hablar de la calidad del agua es un círculo vicioso en la que todos salimos perdiendo. Pero parecería que a la Conagua no le interesa romper esta cadena contaminante. Quizá porque sólo cuenta lo que ingresa a sus cajas grandes y chicas.
HABERES
IMPORTANTE certificación recibieron profesores de Tabasco. Adelantados al Nuevo Modelo Educativo un grupo de 57 docentes participaron en el Programa Nacional de Inglés, resultado de una alianza entre el Gobierno de Tabasco, a través de la Secretaría de Educación, y la Embajada Británica. El titular de la Setab, Ángel Solís la importancia del inglés en todos los niveles escolares en el actual esquema de internacionalización.
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