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Falta de credibilidad en la política: diagnóstico y propuestas

Falta de credibilidad en la política: diagnóstico y propuestas

JOsé Martínez

El pasado lunes estuvo en Tabasco el investigador y politólogo Fernando Vallespín, quien es catedrático de Ciencia Política en la Universidad Autónoma de Madrid, presidente del Centro de Investigaciones Sociológicas, y profesor en universidades como Harvard, Frankfurt, Heidelberg y Malasia. Autor de diversos libros y regularmente escribe en el diario español El País.

Vallespín estuvo como invitado del Instituto de Administración Pública de Tabasco, como parte de su programa de Doctorado en Gobierno y Políticas Públicas dirigido a funcionarios estatales y para la formación de servidores públicos.

Durante su participación Vallespín señaló que a su juicio el populismo -referido básicamente a Europa- es una forma de hacer política en la que el divisionismo, “nosotros los buenos” y “ustedes, los otros”, es parte fundamental, así como el uso del lenguaje y la retórica.

Francisco Peralta Rodríguez, ex alumno del invitado, y quien fungió como presentador de la obra del académico español, apuntó durante su participación que el debate y análisis político en nuestro país sirve para identificar nuestros problemas, con el objetivo de hallar soluciones.
Esto ante una falta de credibilidad en la política, por lo que debemos encaminarnos a revisar por qué la democracia representativa no ha cubierto las expectativas y necesidades de las mayorías.

El estudio y la disección de las formas de actuar es necesario, en la idea de cerrarle el paso a esta forma de hacer política de la que ahora se acusan a gobiernos que se han alejado de los estándares democráticos, ya sea provocado o programado.

El populismo -como lo definió Vallespín- se alimenta de las debilidades de la democracia y en esa función es que logra sobrevivir y ampliarse. De acuerdo al politólogo español el populismo es a la democracia lo que la fiebre es a la vida. Es una señal de alarma, de que algo está fallando en el cuerpo político.

Si bien el investigador español ha estudiado las democracias europeas y de los Estados Unidos, es poca la referencia que hace al contexto latinoamericano. Aunque el tema no es ajeno a la discusión política a nivel regional y más en los contextos electorales sobre todo de América del Sur.

Es este caso es el académico Héctor Díaz Polanco, miembro del Sistema Nacional de Investigadores de México, nivel III y un autor prolífero, tiene otra concepción del populismo, y que lo atribuye a lo popular, a las masas, a la defensa de los derechos de los sectores marginados y del colectivo.

Díaz Polanco señala que cuando en la región se habla de algún tipo de transformación lo primero es que se tacha de populista a quienes abanderan las respuestas populares a los partidos tradicionales como una forma de rechazo y descalificación. El objetivo de la política, como dijo Peralta Rodríguez, debe ser reivindicar a las clases más desprotegidas.

Es parte de nuestra realidad y que convergen en las debilidades o fallas de la democracia. Una tarea pendiente no solo en México sino en el mundo y de las que pueden dar cuenta los miles de marginados sociales y económicos. La política debe volver a sus orígenes.


HABERES

GINA Trujillo presentó el último eje rector de sus propuestas, la seguridad. Anunció que se basa en cinco líneas estratégicas: Seguridad Pública frente a la delincuencia; combate a la impunidad; prevención social y el delito; reestructura administrativa; el sistema penitenciario y reinserción social. Una tarea urgente para el próximo gobierno.