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Frustración anteimpunidad

Frustración anteimpunidad

Por: Felipa Nery

El auditor superior de la Federación, Juan Manuel Portal, rindió el Informe del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública del año 2015, en el que señaló que el gasto federalizado para programas sociales, muestra deficiencias, 216 mil millones de pesos no han sido solventados por los gobiernos estatales, desde el 2011; además las entidades reportan subejercicios por 33 mil 431 millones de pesos; Portal, advirtió que la percepción de la sociedad es de que la impunidad prevalece y que la sanción no es oportuna, o que no se presenta, lo que alimenta la frustración social y mina la relación entre gobierno y ciudadanos. Informó, que en la revisión de la cuenta pública se han identificado cuatro áreas de riesgo: 1) El gasto en infraestructura y obras públicas, debido a que ha generado, de manera recurrente, una serie de observaciones, a la par con su importancia relativa en términos presupuestales; 2) Las contrataciones entre dependencias y entidades del sector público, donde se han dado irregularidades de manera reiterada en distintos ejercicios fiscales y la problemática alcanza niveles importantes de recursos públicos desde el año 2012; 3) Los padrones de beneficiarios y el impacto que se tiene en la eficacia de las políticas de desarrollo social enfocada a los sectores más vulnerables de la sociedad, y 4) el Sistema de Evaluación del desempeño, para medir los resultados de las políticas públicas y servir de guía para orientar la asignación de presupuesto con base en los logros obtenidos. Además de lo anterior, el auditor advierte, que la deuda pública en México “plantea riesgos para su sostenibilidad y está cerca de los límites de los criterios prudenciales que recomiendan los organismos internacionales”; indicó, que en el año 2000, el endeudamiento público neto se ubicaba en los 2 billones 51 mil millones de pesos. En 2006 llegó a 3 billones 314 mil millones de pesos, en 2012 el monto subió a 5 billones 890 mil millones, y en 2015 la deuda creció a 8 billones 633 mil millones de pesos que representan el 45.7 por ciento del Producto Interno Bruto; por lo que recomendó a la Secretaría de Hacienda “realizar una evaluación amplia y rigurosa, considerando el complejo e incierto contexto macroeconómico internacional y sus repercusiones en la economía de México”. Lo que ha dibujado Manuel Portal, Auditor de la Federación, es la triste realidad que vive el país, ante la falta de capacidad administrativa de sus gobernantes, aunado por supuesto, a los altos niveles de corrupción en el manejo de los recursos públicos, que no les importa despilfarrar el dinero público y al advertir que no les alcanza, con facilidad buscan el endeudamiento público, hipotecando las finanzas futuras, sin importar que no se puedan cubrir los gastos esenciales de atención a la salud, a la seguridad, a la educación. México atraviesa una situación económica crítica, recurrir al endeudamiento no es la solución. Hace falta combatir la corrupción y reprogramar el gasto público, el gasto corriente, hacerlo más eficiente, porque el crédito hoy es más caro y al destinar recursos del presupuesto al pago de deudas, se frena el desarrollo, se hipoteca el futuro.