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LA CAJA DE PANDORA

FELIPA NERY

“No nos hagamos los distraídos. Hay mucho de complicidad. ¡…Es para todos! En nuestras ciudades está instalado este crimen mafioso y aberrante, y muchos tienen las manos preñadas de sangre debido a la complicidad cómoda y muda.” (Papa Francisco)

El asesinato de seis jóvenes normalistas y la desaparición de otros 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa, en el municipio de Iguala Guerrero, ha venido a destapar la caja de pandora, del cúmulo de complicidades de las autoridades, complicidades, porque conociendo de la existencia de vínculos entre autoridades y la delincuencia organizada, no se actúan con prontitud, ahora resulta que el Procurador General de la República Jesús Murillo Karam, dice que René Bejarano no le entregó las pruebas para proceder en contra del alcalde José Luis Abarca, de quien tanto la PGR, el CICEN y el ejército, tenían conocimiento de sus nexos con la organización delictiva “Guerreros Unidos”. La Procuraduría General de Justicia de esa entidad ya investigaba desde el 2013 al alcalde Abarca, por sus posibles nexos en la desaparición y asesinato de tres líderes perredistas, pero la incapacidad de las autoridades investigadoras, impidió proceder oportunamente en contra de este, por lo que continuó actuando impunemente. Ahora que le quieren echar todas las culpas al gobernador de Guerrero Ángel Aguirre de no actuar, éste ha salido a decir, que desde hacía un año él se venía sentando con responsables de la PGR, CICEN y el Ejército en esa entidad, y les había advertido de los nexos de este alcalde  –y otros–, con la delincuencia, también René Bejarano –el señor de las ligas-, dice que testigos del  asesinato de los líderes perredistas se negaban a declarar ante la Procuraduría General de Justicia de Guerrero, por lo que él acudió a la PGR con Murillo Karam a pedirle  se encargara de las investigaciones, admitió que los testigos no se presentaron a declarar en 2013, pero en marzo de este año le hicieron llegar las pruebas,  que incluso participó el obispo de Guerrero Raúl Vera, quien difudió las declaraciones de un testigo, hechas ante un notario público. La función constitucional del Ministerio Público, tanto federal, como estatal, es la de investigar, son ellos, quienes deben hacer las investigaciones de los delitos, ellos deben encontrar las pruebas que les permitan incriminar, responsabilizar a las personas que se señalan, pero no lo hacen, ¿por qué?, no sabemos, si por incapacidad, o por complicidades, pero lo cierto es que la sociedad tiene miedo de ir a denunciar y declarar ante los ministerios públicos, porque sus vidas corren peligro por lo que ahí declaran. Estos hechos de Iguala Guerrero que han escandalizado al país y al mundo, han venido a destapar la caja de pandora, porque al día de hoy, han encontrado ya diez fosas clandestinas con cadáveres, aunque  no han dicho el total de restos encontrados, sólo se dijo que en la primera  encontraron 28 cadáveres, que hoy confirman  no pertenecen a los jóvenes desaparecidos, según las pruebas de ADN realizadas a los familiares de los jóvenes normalistas.