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La contaminación que provoca Pemex se lleva hasta en la sangre

Por: José Martínez

La industria petrolera va acompañada de beneficios y perjuicios. Del correcto aprovechamiento de este recurso depende que sea para bien. Lamentablemente se ha privilegiado el mercado en lugar de las personas y sus comunidades. Así podemos ver que Pemex le ha provocado una severa contaminación a Tabasco. Los reclamos al parecer sólo se han quedado como grumos pegados al suelo, ya que la empresa petrolera de manera hábil siempre ha evadido su responsabilidad. Se hizo costumbre el pago de “indemnizaciones”, aunque estas no cubrieran los efectos a futuro.

Hace unos días desde el congreso local, José Antonio de la Vega Asmitia, el diputado del PRD, y presidente de la JUCOPO, lanzó una acusación y una advertencia: Es tiempo de verificar los daños que está haciendo la empresa al estado, pero sobre todo que pague la factura que le debe de años atrás.

Con la extracción de los pozos petroleros se ha lastimado, y mucho, al aire, agua, suelo y lo más grave, al propio ser humano. Pero, ¿qué es lo peor?, tal vez no reconocer esa responsabilidad, y continuar afectando lo poco que existe a su alrededor.

Habitantes de Nacajuca, por ejemplo, se han quejado de tales daños, aunque ahora su preocupación es otra. Los grandes mecheros que están casi frente a sus narices, y que de vez en cuando les queman hasta la dignidad, sobre todo porque han descubierto que se están enfermando de manera silenciosa sin que haya una respuesta favorable por parte de Pemex.

Los campesinos han comprendido que de nada sirven ciertos pagos por los cultivos dañados. Ahora hicieron conciencia, porque algunas asociaciones se han atrevido a llevar a cabo análisis, experimentar y obtener resultados, donde al final se ha descubierto que los niños traen cierta sustancia en la sangre (plomo), como se comprobó hace unos meses en la comunidad de Torno Largo, Paraíso.

De la Vega Asmitia indicó que los legisladores intervendrán en el asunto. “No todo debe ser grilla”, sostuvo. Y dejó ver que es importante velar por la salud de los tabasqueños y castigar a la empresa por los daños causados. En el mismo sentido se ha pronunciado la diputada de Morena, María Luisa Somellera, quien recordó que desde el inicio del movimiento lopezobradorista el tema del petróleo ha estado en la agenda de los reclamos.

Aunque una de las autoridades legislativas encargadas de entrarle de lleno al tema debe ser la Comisión Especial para la Prevención y Atención de los Daños Causados por los Desastres Naturales, que preside el diputado del Partido Verde, Federico Madrazo. Sin embargo, se entiende que su preocupación está centrada en los pocos votos que obtuvieron en la pasada elección. Recordemos que el PVEM “reclutó” a la ex diputada del PRD, Verónica Pérez, quien se distinguió por retomar la vieja política de presión por indemnizaciones.

Otra parte de corresponsabilidad se encuentra en la Sernapam y Profepa, una local y otra de índole federal, a quienes les toca ver la relación con Petróleos Mexicanos y tratar estos asuntos.

Lamentablemente la tarea sigue pendiente, mientras la lluvia ácida continúa afectando la salud por la actividad petrolera. De ahí la urgencia de que el problema deba atacarse desde todos los flancos, porque la abundancia de dinero que abonaba Pemex se ha diluido… y ahora sólo queda esa contaminación, la cual se lleva hasta en la sangre. Un asunto de atención urgente, porque están contados los días de la industria petrolera sin intermediarios.