José Martínez
El combate a la corrupción es una bandera que Andrés Manuel López Obrador enarboló en sus tres campañas como candidato a la Presidencia. En sus discursos ya como mandatario se ha convertido en un eje permanente.
El presidente López Obrador no quita el dedo del renglón en ningún instante, e incluso en cada una de sus “mañaneras” repite una y otra vez que en las pasadas administraciones hubo corrupción, y como resultado, hoy el país está desbalanceado.
Algunos sostienen que no hay que detenerse en el pasado. Se le ha criticado por esa forma de hacer política. Pero con la detención de Emilio Lozoya, ex director de Pemex, no pocas voces tendrán que guardar silencio.
A este funcionario se le relaciona con los sobornos que dio en su momento la empresa Odebrecht, acusándolo de haber recibido por lo menos 12.5 millones de dólares, además de lavado de dinero, cohecho y asociación delictuosa.
La captura ocurrida ayer en Málaga, España, cuando se dice iba a encontrarse con el mandatario Enrique Peña Nieto con el fin de negociar “un asunto” con la 4T, esto de acuerdo con información exclusiva de la plataforma digital Políticaonline.
Según fuentes de su entorno, Lozoya quería conversar con el ex presidente para organizar una posterior reunión con el directivo de Televisa, Bernardo Gómez, siempre con la meta de que se pusiera fin a la “persecución” del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Con las reservas, desde luego, porque no acepta que las serias denuncias en su contra comenzaron mucho antes del inicio de la 4T.
“La detención enciende las alertas en el Grupo Atlacomulco. Lozoya fue -junto a Luis Videgaray y Miguel Ángel Osorio Chong- una pieza elemental para el fondeo de la campaña del 2012. Fondeo en el cual Odebrecht tuvo un rol prominente, tal como ya fue comprobado”, indica Políticaonline.
De nuevo el escándalo alcanza al PRI. Es una medida que no esperaba. Los temas de agenda giran ahora en torno a Lozoya.
Por más que el dirigente nacional de este partido, Alejandro Moreno, busque enredar los temas como inseguridad, educación, salud y desempleo para tratar de culpar al gobierno de Morena, las señales indican otro rumbo. Los excesos por parte de los ex funcionarios priistas en Pemex rebasaron los límites, ha dicho López Obrador.
Emilio Lozoya había abandonado México el 30 de abril. Su huída fijó como destino Alemania, un país donde se sentía fuera del alcance de las autoridades mexicanas por su doble nacionalidad, conseguida gracias a su esposa desde 2016, Marielle Eckes. La extradición desde allí era poco probable porque obligaba a las autoridades alemanas a entregar a un nacional para su procesamiento judicial en el extranjero. Sin embargo, el exfuncionario ha caído en España, una nación que tiene un intercambio mucho más fluido de detenidos con México.
Si de trofeos se trata, junto con Lozoya estaría Genaro García Luna, Juan Collado y Rosario Robles. Personajes de cuello blanco que tienen información privilegiada que llevaría hacia Enrique Peña Nieto, Felipe Calderón y Vicente Fox, los tres mandatarios recientes.
HABERES
El presidente Andrés Manuel López Obrador firmó una iniciativa de reforma al Poder Judicial con la que se pretende fortalecer al Consejo de la Judicatura Federal para combatir corrupción, nepotismo, impunidad y acoso sexual. La iniciativa planteada por el presidente de la Suprema Corte Arturo Záldivar será enviada al Congreso. Un paso más de AMLO ahora en la Corte.
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