HUIMANGUILLO, TAB.- Tremendos hoyancos, será la herencia que dejará el alcalde huimanguillense José del Carmen Torruco Jiménez en la populosa colonia Alfa y Omega, que durante este trienio no recibió ni siquiera un viaje de tierra para su camino de acceso, situación que pone en predicamento a los habitantes del lugar, que con miedo transitan temerosos de que sus unidades motrices puedan sufrir una avería mayor.
Las imágenes enviadas por vecinos de esta periférica colonia han dejado al descubierto la apatía por parte de las autoridades locales, ya que su falta de interés por hacer algún beneficio social como gobierno a este lugar, fue nula, y si ha esto le sumamos que las luminarias de la calle Tulipán (acceso principal), la mayoría se encuentran fundidas, convierten a esta colonia en una boca de lobos.
Las lluvias han jugado un factor importante en delatar la pésima actitud del munícipe Torruco Jiménez, al no gestionar una rehabilitación para esta colonia, donde sus lugareños vieron pasar este trienio sin sol ni sombra, esperando que la siguiente administración sí los tome en cuenta y logren mejorar sus caminos y vías de accesos, donde las peticiones son buen alumbrado, caminos accesibles y mayor vigilancia policíaca, ya que se sienten a merced de la delincuencia.
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