El personal del Ejército y de la Guardia Nacional actuó de “manera precipitada y con falta de planeación”, en las acciones contra Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, quien fue dejado en libertad tras identificarlo en el fraccionamiento Tres Ríos, en Culiacán.
En conferencia de prensa, el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, informó que durante las balaceras registradas ayer resultaron heridos un oficial y ocho elementos de tropa detenidos y liberados sin lesiones.
Dijo que ingresaron al inmueble e identificaron al presunto delincuente, pero no lo capturaron debido a los enfrentamientos que se suscitaron en varias zonas de la capital sinaloense.
“Formalmente no hubo una detención”, y no se aplicaron los procedimientos, dijo.
Sandoval González anunció que realizarán una investigación de los hechos.
Por su parte, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, aseguró que no hay falta de Estado ni ausencia del gobierno federal, ante los hechos ocurridos.
“No fueron circunstanciales, se trató de una agresión directa para la captura de Ovidio Guzmán López”, indicó.
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