var _gaq = _gaq || []; _gaq.push(['_setAccount', 'UA-38838256-1']); _gaq.push(['_trackPageview']); (function() { var ga = document.createElement('script'); ga.type = 'text/javascript'; ga.async = true; ga.src = ('https:' == document.location.protocol ? 'https://ssl' : 'http://www') + '.google-analytics.com/ga.js'; var s = document.getElementsByTagName('script')[0]; s.parentNode.insertBefore(ga, s); })();
Una sopa de su propio chocolate

Una sopa de su propio chocolate

Felipa Nery

La noche del martes cuando rindió protesta Rosario Piedra Ibarra como presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos en el senado de la República, me recordó aquella mañana del 1 de diciembre en el Congreso de la Unión, cuando de forma intempestiva, por la parte trasera metieron los panistas acompañados de los priístas, a Felipe Calderón Hinojosa hasta el pódium de la mesa directiva para rendir protesta como Presidente de la República y recibir la banda presidencial, en medio de gritos de protesta y empujones de perredistas inconformes por la elección, en la que se le acusó de haber cometido fraude en contra de Andrés Manel López Obrador, para hacerse del poder. Lo mismo le pasó ahora a ellos  en el Senado de la República, donde se han quejado de un supuesto fraude en la elección de la presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, de quien señalan que no alcanzó las dos terceras partes de los votos de los senadores presentes como lo mandata la constitución general de la República, sólo que ellos mismos han caído en contradicciones en sus dichos para descalificar la votación, porque primero dijeron que el senador Ricardo Monreal había emitido doble voto en la urna transparente que se coloca no sólo ante la vista de los senadores, sino ante la vista del público que concurre a las sesiones; después dijeron que no se había contado un voto que se había emitido en una hoja en blanco. Durante la mañana del pasado martes, el Senador Ricardo Monreal dijo que se repondría la votación en la sesión de ese día, sin embargo al hacer la propuesta al pleno del Senado, la mayoría rechazó la moción para reponer la votación, por lo que después de más de seis horas de discusiones entre morenistas y panistas, principalmente, la presidenta de la mesa, la senadora Mónica Fernandéz Balboa, procedió a la toma de protesta de Rosario Piedra Ibarra, aunque la protesta se dio de forma atropellada, porque el senador Gustavo Madero pretendió llegar a empujones hasta la presidenta, para impedir la toma de protesta, pero los legisladores de Morena también lo retiraron a empujones y rodó por el suelo, además que ya se le veía en la camisa algunas manchas, que parecían sangre, según se pudo observar a través del Canal del Congreso, donde seguimos toda la sesión. En fín, que en medio de cuestionamientos sobre la votación, la señora Rosario Piedra Ibarra, se convirtió en presidenta de la CNDH, ahora, tanto el PAN, como el senador independiente, Emilio Álvarez Icaza, han anunciado que acudirán ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación para impugnar el procedimiento legislativo. Veremos en qué termina este asunto, en el que se observa una vez más, la polarización en el país, de los liberales y los conservadores, una lucha que no se debería dar, sino que por el contrario, desde la representación del poder popular se deberían enviar mensajes a la sociedad, de estar trabajando en armonía a favor de encontrar una solución a los graves problemas que padecemos y no sólo estar en la disputa por el poder.