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Visita pastoral y de estado

Por: Felipa Nery

Jorge Mario Bergoglio, el Papa Francisco, estará en México del 12 al 17 de febrero, para realizar una visita de Estado y pastoral, estará en el sur, centro y norte del país, lo que le permitiría tener una visión completa de lo que ocurre en el país, si es que le permiten el acercamiento de quienes quieren exponer la situación que se vive en México; por lo pronto, los padres de los 43 jóvenes desaparecidos en Guerrero que habían solicitado una entrevista con el Pontífice, no serán recibidos por él, tan sólo les han asignado unos lugares para que puedan asistir a la misa que oficiará en Chihuahua. La visita del Papa costará muchos millones de pesos, que servirán de poco, porque su llegada no cambiará en nada la difícil situación de pobreza, violencia y violación grave a los derechos humanos que aquí vivimos, los gastos van, no solo en la atención personal al Pontífice, sino a toda la comitiva que le acompaña, además de la logística, la seguridad que estará a cargo del Estado Mayor Presidencial, y el acondicionamiento de todos los espacios donde se presentará públicamente.  Los más interesados en su visita, son sin duda, los gobernantes que lograrán que por un momento, los millones de mexicanos que profesan la religión católica, se mantengan embaucados frente al televisor, siguiendo cada uno de los pasos que dé don Jorge Mario. Llegará mañana viernes por la tarde-noche al aeropuerto de la Ciudad de México, será recibido como jefe de Estado por parte del Presidente Enrique Peña Nieto, en Palacio Nacional, donde estarán no solo los integrantes del gabinete, sino invitados especiales, que por supuesto que no seremos ni usted, ni yo, sino la clase pudiente de este país, que no tendrán que ir a las aglomeraciones que se registrarán en Chiapas, Morelia, o Ciudad Juárez. También oficiará una misa en la Basílica de Guadalupe; otra misa en el Centro de Estudios de Ecatepec, visitará el hospital pediátrico Federico Gómez; el 15 de febrero presidirá en Chiapas, una misa con comunidades indígenas en el Centro Deportivo Municipal, tendrá una comida con familias; en el Estadio de Tuxtla celebrará otra misa; el martes estará en Morelia, donde celebrará una misa dedicada a sacerdotes, religiosas, religiosos, consagrados y seminaristas; ese mismo día por la tarde se reunirá con jóvenes, visitará un centro penitenciario; en Ciudad Juárez, se reunirá con trabajadores y oficiará una misa en el área de la feria, “el papa quiere acercarse a los mexicanos y mexicanas  para consolarnos en estos momentos difíciles que estamos viviendo, a causa de la inseguridad, la inequidad, la pobreza, la corrupción y la violencia, y mostrarnos el camino que hace posible un desarrollo integral que no excluya a nadie, en el amor misericordioso”, afirmó el presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano; o sea, que dará consuelo, por la situación difícil que vivimos, pero después de ese consuelo, los mexicanos volveremos a nuestra triste realidad de inseguridad, pobreza, corrupción, desempleo, y los gobernantes volverán a seguir padeciendo y a ingeniarse otra forma que permita la distracción de la realidad.