Felipa Nery
Andrés Granier Melo alcanzó su libertad absoluta el pasado miércoles, después de seis años de estar privado de su libertad; si bien desde el mes de enero estaba en prisión domiciliaria, aun así, seguía privado de la libertad de transitar con libertad, por acusaciones sin fundamentos que finalmente la autoridad desechó y lo dejó totalmente absuelto de los posibles delitos que lo acusó el ex fiscal Fernando Valenzuela Pernas, quien llegó al cargo, no para servir a los tabasqueños, procurarles justicia, sino para cobrar venganza por sus frustraciones de no hacer realidad sus aspiraciones políticas, de ser Presidente municipal de Cárdenas, aspiración que tuvo desde sus un “triunfo” que estaba lejos de alcanzar y que finalmente no se concretó, porque se formó el primer Consejo Político Municipal, lo que lo hizo salir de Tabasco, y regresar algunos años después a Tabasco, con la misma aspiración de ser presidente municipal del pueblo, del que se había mantenido alejado y olvidado de sus necesidades; lo mucho que pudo lograr, fue ser diputado por el Partido Revolucionario Institucional, con el apoyo de Andrés Granier Melo, a quien también habría pedido ser candidato a presidente municipal y al no lograr la candidatura, vinieron sus odios y descalificaciones hacia él, al grado de separarse del PRI y sumarse a las filas del PRD, al lado de su amigo Arturo Núñez, que lo hizo Fiscal del Estado, quizá pensando en que pudiera ayudar a dar respuesta a los reclamos de procuración de justicia de la sociedad, sin embargo él, sólo uso la Fiscalía para buscar venganzas políticas, encarcelando a personas que le habrían negado algún favor político, como fue también el caso de Rosa Melida, quien fue directora de servicios al público en Tránsito del Estado, y no sólo la combatió desde la tribuna del Congreso, como diputado, sino que además la encarceló y también salió en libertad, totalmente absuelta, para morir después, por el dolor que le habría causado la injusticia de ser privada de su libertad, forma injusta. Afortunadamente, Andrés Granier tuvo la fortaleza que le dieron su familia y sus verdaderos amigos, aguantó y cuando se terminó el mal gobierno de Arturo Núñez y su pandilla, ha logrado salir absuelto, libre de toda culpa, después que las anteriores autoridades hicieron todo lo posible para mantenerlo privado de la libertad. Afortunadamente, la vida le ha alcanzado para regresar en libertad a su tierra, para recibir las muestras de solidaridad y de afecto, de miles de personas, cosa que no podría hacer el anterior gobernador, quien a través de las redes sociales recibe el repudio absoluto por parte de los tabasqueños, porque durante su administración no hizo nada a favor de la sociedad tabasqueña; en cambio Andrés Granier sí goza del afecto, cariño y respeto de muchos tabasqueños, porque en su gobierno tendió la mano a las personas que lo buscaron, no excluyó, apoyó, sobre todo a las clases bajas que siempre fueron sus principales aliados para acceder tanto a la presidencia municipal de Centro, como a la gubernatura.