HOY DÍA C.

MARYCHUY CASTILLO

El caso, Rullán, ha sido uno de los asuntos desde hace ya varios años, el objetivo de los diputados opositores al Revolucionario Institucional.  Originado porque un día, comunicadores que se autonombran defensores del pueblo, de esos que creen tener la verdad absoluta, – y que con toda la fuerza de su voz pueden gritar, injuriar, insultar sin que pocos le puedan refutar algo, y si son políticos tienen que atenerse a las consecuencias – esos que  se levantaron sin una nota de color más amarilla que las diarias, y dijeron éste tipo es insolente, prepotente, grosero, y  rico, porque ya lo dice el refrán, para que la cuña apriete tiene que ser del mismo palo igual a ellos pues,y aclaro no todos los ricos son así, hay mojo AMLO.  La  cuestión deriva en que a partir de las acusaciones de corrupto, encubridor  del sistema y otras lindezas hacia el fiscal del órgano superior del Congreso, los legisladores perredistas enfocaron sus baterías hacia el personaje exigiendo la renuncia, de Francisco, sin que hasta la fecha lo hayan logrado, el colmo ha sido la pantomima montada hace una semana en el Congreso, en que con brujerías, limpias y otras estupideces pretendieron sacarlo del encargo, le han dicho los pejejistas que si tiene dignidad que renuncie, creerán que la tiene . Dice el abogado  Tito Villegas que él no observó ninguna situación irregular cuando fungió como diputado, de modo que la solicitud que desde hace tiempo ya, se viene haciendo con la salida de Rullán, no se trata de acuerdos, ni de conceptos, sino de condiciones establecidas en las leyes y si se cumplen aplicarla nada más. Hoy, dice la diputada Neyda García, que, hágame Usted el recavor fabron,  se encuentra cocinando, no estudiando, el dictamen con que se pretende destituir a Francisco Rullán, ahora piensan que con una receta lo destituirán. El hombre fue electo hasta el dos mil 17, aunque Usted, no lo crea.A menos que sea a lo cerdo.