LA REFORMA FINANCIERA

JUAN CARLOS REYES TORRES

El Presidente Enrique Peña Nieto va volando, tiene prisa y cuenta con una sólida estrategia para sacar a México de la inmovilidad y el desgobierno que heredó. El instrumento por excelencia que utiliza para la concertación política es el Pacto por México, habrá que reconocerle a Pepe Murat el trabajo originario de diseño e instrumentación que hizo.
Como resultado del Pacto se han aprobado reformas que le van a cambiar la vida a las clases medias, piense por ejemplo en el dinero que usted se ahorraría si sus hijos asistieran a una escuela pública y que la educación recibida fuese de alta calidad. Compare lo que cuesta la renta mensual del servicio de telefonía celular en otros países y lo que usted ahora paga; a partir de la Reforma en Telecomunicaciones vamos a contar con mayor competencia entre los proveedores y por supuesto mejor precio.
Ahora, el Presidente Peña envió al Congreso una iniciativa de Reformas en materia financiera y bancaria; si nuestros benditos legisladores federales tienen a bien aprobarla las clases medias vamos a obtener una serie de beneficios tangibles y concretos en nuestros bolsillos. Los Diputados Federales y Senadores tienen que modificar 34 leyes para alcanzar el propósito de modernizar la banca, fomentar el ahorro y la competitividad del país.
Dice el Presidente Peña que “esta iniciativa de Reforma Financiera representa una oportunidad única para que el sector financiero contribuya a un desarrollo incluyente que promueva el crecimiento de México”. La iniciativa de Reforma Financiera propone a través de cuatro ejes, dar mayor flexibilidad e incentivos para que el sector privado y la Banca de Desarrollo de forma conjunta, otorguen más créditos y que éstos en mejores condiciones puedan:
I. Fomentar el crédito a través de la Banca de Desarrollo;
II. Incrementar la competencia en el sector financiero;
III. Ampliar el crédito de las instituciones financieras privadas; y
IV. Asegurar la solidez y prudencia del sector financiero en su conjunto.
Para lograr todos estos buenos propósitos tiene que trabajar mucha gente, comenzando por la Comisión Federal de Competencia, la cual tiene que elaborar un diagnóstico sobre las condiciones de competencia que viven entre sí las organizaciones financieras. También se le va a pedir a la Bolsa Mexicana de Valores que analice la pertinencia de que empresas medianas coticen en ella. La CONDUSEF, en este proceso va a jugar un papel fundamental, -y, que bueno que la dirige un extraordinario, radical e inteligente hombre de izquierda: Di Constanzo- porque tiene la tarea de constituir un Buró de Entidades Financieras para que todos nosotros  –los usuarios de los bancos- podamos conocer de primera mano información relevante de estas sociedades que nos permitan tomar mejores decisiones cuando contratemos servicios.
Con esta Reforma los Bancos habrán de prestar más dinero a más bajo costo, lo cual fortalece nuestra economía al crearse más empleos. Los dirigentes de los Partidos Políticos deben dejar atrás prejuicios y mezquindades. Vamos a mover a México.