Arturo Núñez Jiménez, gobernador de la entidad.
REDACCIÓN
AVANCE
VILLAHERMOSA, TABASCO.- El gobernador Arturo Núñez Jiménez se pronunció a favor de modificar los mecanismos de control del gasto que se ejecutan en el país, a fin de evitar problemas financieros como los que hoy afronta Tabasco, a causa del mal manejo de los recursos púbicas que realizó su antecesor, Andrés Granier Melo. Tras el anuncio de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), respecto a que retomará las denuncias sobre desvío de recursos en la entidad y fiscalizará el ejercicio del gasto federalizado durante la administración de Granier para determinar probables irregularidades, el mandatario estatal confió que el caso Tabasco será el parteaguas para mejorar el sistema de fiscalización de los recursos públicos. “Tenemos un diseño institucional de revisión del gasto a posteriori, con el propósito de no frenar la operación y no estar auditando en el momento que los recursos se están ejerciendo, pero está muy desfasado en el tiempo y, por tanto, no atiende al problema real, porque el problema de Tabasco no fue de un año, no fue de una operación que tú dijeras, ‘hombre, a cualquier cazador se le va la libre’; esto fue una conducta que, como dicen los abogados, fue grave, reiterada y sistemática”, enfatizó el jefe del Ejecutivo. Luego que el titular de la ASF, Juan Manuel Portilla, anunciara este martes que se auditarán puntualmente los fondos ejercidos en 2012, durante la administración de Andrés Granier, sobre todo en los rubros de educación básica, salud y seguridad, Núñez Jiménez señaló que “seguramente ellos en su oportunidad constatarán todo lo que descubran y que nosotros hemos adelantado a decir”.
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