NOTIMEX
AGENCIA
CIUDAD DE MÉXICO, 20 JUN.- Capaz de convertir una melodía clásica en un trazo pictórico, capaz de permitirse observar un paisaje, analizarlo y llevarlo por el mundo de los sueños para luego plasmarlo en una obra, así es el pintor Manel Pujol, atrevido, transformador de esquemas, de códigos, es un explorador permanente de la vida.
La esencia de Picasso, Dalí y Miró, a quienes tuvo la oportunidad de descubrir de forma directa en distintos momentos de su vida, abraza a un Pujol que llega para envolver con su creatividad y sensibilidad una nueva muestra en donde comparte espacio con 18 artistas de diversas disciplinas: “Arte en Colectivo”.
“Me siento seguro cuando rompo los códigos, cuando experimento; yo siempre estoy dudando quizá porque en el fondo sé que lo seguro es lo mortal”, señalaba en algún momento el pintor español.
Ese estilo capaz de combinar herramientas, intuiciones, experiencias, accidentes que se convierten en afortunados, técnicas que se combinan con el “abrazo” de creatividad y experiencia que le “heredaron” los grandes, quienes parecen acompañarlo en todo momento.
Pujol se siente afortunado de ser uno de los “herederos” de la escuela española por tradición y por relación personal, de esos tres “monstruos” españoles del siglo XX: Picasso, Dalí y Miró.
Tras recorrer decenas de espacios a nivel internacional y en México, donde reside desde 1998, ahora esa esencia de Pujol llega con “Arte en Colectivo”.