ABISAC MÁRQUEZ
AVANCE
El secretario de Gobierno, César Raúl Ojeda Zubieta, negó que el caso “Granier” sea una persecución política y aclaró que sólo se trata de un asunto estrictamente de ley.
“Se actuó con responsabilidad estrictamente con la ley en la mano y se está tratando de resarcir los daños del patrimonio del pueblo exclusivamente no hay ningún otro afán; para nadie es gratificante ver a un funcionario público en la cárcel pero tampoco los responsables de la administración de los recursos publico podemos quedarnos con los brazos cruzados cuando se demuestra de manera fehaciente que hubo irregularidades en el manejo de los mismos.”
Entrevistado previo a la presentación del Plan Estatal de Desarrollo 2013-2018, dijo que tanto el gobierno federal como el estatal están actuando con absoluta responsabilidad sin dar ningún lugar a suspicacias.
En cuanto a que el Andrés Granier Melo, pueda ser traído a la entidad para ser juzgado directamente, Ojeda Zubieta dijo que el tema de su salud esta gravitando sobre ello, pero entienden tarde que temprano al margen de donde sea la declaración tendrá que responder a los agravios.
Indicó que hay pruebas del quebranto financiero en que la pasad administración dejó al Estado y por ello se está actuando para “limpiar la casa” y para que el estado retome el camino del progreso.
“Ahí están las autoridades correspondientes quienes habrán de determinar los elementos que cada una de las partes presente a nosotros nos queda claro que hubo una administración que de manera irresponsable puso en vilo la seguridad y salud de Tabasco y los números así lo reflejan, pero será el recurso de la ley para que cada quien argumente al final se dé la razón”.
El encargado de la política interna, resaltó que para llegar a fondo de las investigaciones del saqueo del estado, quien tendrá que ser convocado lo será.
Resaltó que en este tema el Procurador Fernando Valenzuela Pernas, ha mostrado responsabilidad en el ejercicio de sus funciones.
Subrayó que el caso del ex gobernador Andrés Granier, es un estrictamente de la Ley, y no de una venganza política, tal y como él lo declaró.