El programa sexenal fomentará la actividad manufacturera de manera regionalizada y acercará financiamiento, tecnología, capacidad y asesoría especializada con el fin de elevar la competitividad y el empleo.
El eje rector 3 del Plan Estatal de Desarrollo traza acciones para heredar en 2018 un Tabasco con una economía fortalecida
REDACCIÓN
AVANCE
VILLAHERMOSA, TABASCO.- La nueva política económica delineada por el gobierno de Arturo Núñez Jiménez para el periodo 2013-2018 busca heredar a las siguientes generaciones un Tabasco con mayor competitividad, mejor productividad y más oportunidades de empleo.
Así lo plantea el eje rector 3 del Plan Estatal de Desarrollo (PLED) que, entre otras acciones, propone el relanzamiento de Villahermosa –hace años considerada un centro logístico regional para el Sur-Sureste– como ciudad del Conocimiento y de la Salud, el rescate del campo y el despliegue del potencial turístico.
De entrada, el capítulo dedicado a este tema observa el declive que ha sufrido Tabasco en diversos sectores del desarrollo, entre otros factores, por la ausencia de políticas públicas de fomento económico y el poco atractivo del estado para la inversión productiva privada, lo que se ha traducido en un incremento de la pobreza, la desigualdad social y la inseguridad.
El PLED advierte que otros factores que limitan la competitividad estatal están estrechamente ligados a la falta de capacidades de innovación y generación de conocimiento, la desvinculación de la oferta de ramas productivas con los mercados y el bajo nivel de desarrollo manufacturero en los municipios y regiones.
No obstante, el documento rector del desarrollo traza lo que el actual gobierno hará durante el sexenio para heredar en 2018 un Tabasco competitivo, con una economía fortalecida a través de su integración en procesos industriales y agroindustriales.
En esa línea la actual administración hará del eslabonamiento productivo un medio para acelerar la generación de empleos mejor remunerados y mitigar la desigualdad en el ingreso que hoy presentan los sectores tradicionales de la economía local.
Para lograr ese cometido fomentará la actividad manufacturera de manera regionalizada y la vinculará con los sectores tradicionales y el mercado, además que acercará financiamiento, tecnología, capacidad y asesoría especializada para elevar las capacidades operativas de la industria.
NUEVA RELACIÓN CON PEMEX
En el propósito de superar las restricciones al desarrollo y aprovechar las oportunidades de nuevos mercados se activarán políticas públicas y programas orientados a recuperar la economía regional, por medio de actividades agroindustriales y el fomento al turismo asociado con naturaleza y cultura.
El Plan también replantea la relación con Pemex, considerándolo como cliente, instrumentando una verdadera estrategia para el desarrollo de proveedores y contratistas de la industria, y emprendiendo grandes proyectos como el tercer tren de cogeneración de electricidad a partir de gas, de la planta Nuevo Pemex.
Pone énfasis en que la nueva economía será impulsada con proyectos que aprovechen el agua productivamente, más allá de su uso en la ganadería y la agricultura, a través de negocios vinculados a energías renovables.
El PLED, que contiene nueve ejes rectores, 115 objetivos, 199 estrategias y 613 líneas de acción a desarrollarse a través de 11 programas sectoriales, 19 especiales y tres regionales, también considera acciones para equilibrar la oferta y demanda de mano de obra y atraer nuevo intermediarios financieros al estado.
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