SIN JÓVENES NO HAY FUTURO

FELIPA NERY

“Un viaje de mil millas comienza con el
primer paso.” (Lao-tsé)

En nuestra columna de ayer nos preguntábamos ¿qué futuro nos espera?, al referirnos a la situación en la que se encuentran los jóvenes, y en especial, por el caso de la jovencita de 21 años de edad abatida por la policía en una persecución, y un joven de 19 años de edad detenido, ambos, implicados en delitos de secuestro, y en general por la difícil realidad que enfrentan millones de jóvenes en este país que ni estudian, ni trabajan. Y ayer mismo obtuvimos la respuesta por parte de Jorge Mario Bergoglio, el Papa Francisco, quien dijo: “un pueblo no tiene futuro si no va adelante con los dos extremos: con los jóvenes porque tienen la fuerza y con los ancianos porque tienen la sabiduría de la vida, de la historia, de la patria, de la familia” Advirtió sobre la cultura del “descarte” que vive hoy el mundo, donde se deja de lado a los jóvenes y a los ancianos “como si no tuvieran nada que ofrecernos”. Llamó a no aislar a los jóvenes, porque se comete una injusticia al quitarles la pertenencia a una familia, a una patria, a una cultura. Mientras viajaba en el avión que lo llevaba de Italia a Brasil, se reunió en la parte trasera del jet con los periodistas que le acompañaban, a quienes les advirtió del egoísmo en el que se vive actualmente, donde ni se mira al futuro, ni se acuerdan del pasado, “se están quedando en la cuneta” él dijo que quería ver a los jóvenes, pero en el tejido social, no aislados de la vida, ni padeciendo la desigualdad. Expresó su preocupación por la crisis que viven los jóvenes, el alto porcentaje  que no tienen trabajo y existe el riesgo de que una generación nunca tenga el trabajo que les permita tener la dignidad para ganarse el pan, por todo esto, se pronunció por la cultura de la incursión, del encuentro, de incluir a todos en la sociedad. Esta preocupación debe ser no sólo de las personas que están fuera del gobierno. Las autoridades deberían tener dentro de su prioridad la atención de los jóvenes, pero parece que esto no es así. Hace unos días escuchábamos al secretario de Seguridad Pública, general Audomaro Martínez, decir que darían de baja a por lo menos unos 200 elementos que ya pasaban de los 70 años. El militar retirado hablaba de dar de baja a estos policías, como si se tratara de bienes muebles a los que por inservible se les da de baja de los inventarios contables. En vez de aprovechar toda la experiencia de estos policías, que quizá hoy no tengan la fuerza para correr detrás de los delincuentes, pero con seguridad que sí podrían tener conocimiento de la actuación de muchas bandas de delincuentes y su forma de operar en las colonias. Muchos de estos policías que hoy el general quiere “dar de baja”, son policías que trabajaron para lo que antes se conocía como “el escalón operativo”, son policías que tienen amplia experiencia en la investigación, pero como hoy los tienen arrinconados en espera del momento para “darlos de baja”, porque así lo han decidido los nuevos mandos, pues a ellos no les queda de otra, más que acatar disposiciones. Pero sin duda que lo que dice Bergoglio, es una realidad, sin la fuerza de los jóvenes y la sabiduría de los ancianos, no tenemos hacia dónde ir.

De todo un poco

El IFE embargará prerrogativas del PRD hasta por 25.1 millones de pesos, por adeudos que este partido tiene con una empresa que les proporcionó servicios durante el plantón del 2006 que encabezó Andrés Manuel López Obrador en Reforma.