MÉXICO NUEVO

Juan Carlos Reyes Torres, analista político, Twitter: @jcreyest

EL ENTORNO DE LA REFORMA

Hemos insistido en estas páginas, cuidadas con esmero por Calles Broca, que nos llegó la hora. La hora de las grandes definiciones para México. Del trabajo que las élites políticas realicen en los meses que corren depende la viabilidad de la República, esas reflexiones, esos debates, ese diseño de política pública y la ejecución de éstas es un trabajo real de sobrevivencia soberana, de sostenimiento del andamiaje institucional, de la salvaguarda del Estado de Derecho.
Es la economía el factor supremo de cohesión social, ingrediente insubstituible de gobernabilidad y paz social. La economía mexicana es débil, las necesidades de gasto son inmensas, los ingresos insuficientes, necesita oxigenarse, fortalecerse, los medios idóneos para lograrlo son el diseño y ejecución de la política económica. La política económica  del Presidente Peña busca el crecimiento y el bienestar de todos, así, la iniciativa de Reforma constitucional en materia energética se alinea a este propósito supremo.
A diferencia de las últimas décadas, en lo político, contamos con un instrumento adicional, novedoso y útil para la construcción de acuerdos, la distención de conflictos políticos y  el entendimiento sobrio de disensos: el Pacto por México. En el Pacto se están procesando los acuerdos sobre los temas fundamentales de la nación. Es un acuerdo político cupular, partidario, que potencia las representaciones parlamentarias. Es un resorte que potencia la representación formal, la acumulación de poder real de las minorías políticas es exponencial. Me explico: el PRD ostenta –a través del Pacto- mayor poder político, toma y construye decisiones más trascendentes- que  las que pudo tomar con su simple representación legislativa, digamos que tiene más poder político ahora que el que logró –realmente- en las urnas.¿Para qué dinamitar el Pacto?. Hoy el PAN y el PRD cogobiernan, no solamente en el orden municipal y estatal, también en el federal. Si el Pacto fenece prevalece el derecho, en el derecho el PRD es minoría política, su fuerza parlamentaria es débil, su capacidad para transformar la realidad disminuye.
En el análisis de lo social la fotografía preocupa, describe amplias zonas del país sin ley, dominadas por el crimen. Es una lucha que debe continuar en el marco del respeto a los derechos humanos. Por el lado del empleo las cosas no se miran bien, sobre todo por los jóvenes, crecen sin esperanza, nos los motiva ni alegra nada. En las calles otros grupos sociales se le adelantan a AMLO, los maestros muestran su desacuerdo con las reformas que habrán de regresarlos a las aulas a probar vocación, competencia y destrezas sustantivas, tendrán que aprobar la materia pedagógica y no la de movilización popular. En algunas regiones de Michoacán y Guerrero persisten manifestaciones subversivas en donde se conjugan guerrilla y narcotráfico, no todas las autodefensas provienen de grupos marginados, la capacidad delictiva de estos grupos torna más compleja la gobernanza.
Analicemos la reforma energética propuesta con objetividad, mirando el porvenir, imaginando la contención monopólica y el fomento de la competitividad.