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CIUDAD DE MÉXICO.- La nueva acusación presentada por la Procuraduría General de la República (PGR) en contra de Elba Esther Gordillo Morales por defraudación fiscal, parece ser una reacción de la dependencia ante los amparos que ha ganado en el proceso que se le sigue desde marzo pasado por operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada.
Marco del Toro, su abogado defensor, en entrevista con EL UNIVERSAL, estimó que ésta es la estrategia que sigue la PGR, pues la nueva acusación “me parece frágil, contradictoria, y es una reacción a los amparos obtenidos en los que un juez federal determinó que hubo errores en la averiguación previa y que no había elementos sólidos para sostener los cargos iniciales”.
El litigante expuso que el delito de defraudación fiscal que se le imputa ahora a la ex dirigente sindical del magisterio, “es contradictoria, pues si primero se le acusa de operaciones con recursos de procedencia ilícita, cómo se pretende ahora que por recursos obtenidos supuestamente de forma ilegal -como asegura el Ministerio Público- haya pagado impuestos, es un contrasentido”.