POR FAVOR, TRABAJEN PARA AVANZAR

Bendito sea Dios. El que nos conforta en toda prueba

Lamentablemente hay quienes se escudan en pretextos del pasado para evitar mirar al presente, y sobre todo, al futuro. Hay también quienes definitivamente no nacieron para ser visionarios. La combinación de ambos, es un desastre que se transforma en la parálisis social. Un estado no puede avanzar si todos sus brazos están cortados, o, en su defecto, no trabajan con el mismo objetivo. El sistema de gobierno es una entidad viva, en la que cada parte tiene sus características y ventajas, y la relación de cada elemento es diferente con otra; por tanto, el fallo de una o más, provoca un desequilibrio en él.
Tabasco es hoy así. Los sectores de Salud, Educación y Seguridad Pública están hechos una ruina, son una miseria en su desarrollo y carecen de un plan emergente para combatir las situaciones. Uno, tiene (con todo respeto a los adultos mayores) que preocuparse, primero, de estar funcional y no senil, el otro, de tener un poco de humildad, o colgarse un letrero que le recuerde la palabra “respeto” en los lentes, y ese encargado de que el territorio no tenga problemas de delincuencia, parece que vive en un universo alterno, donde las cosas están bien, y la gente tiene una buena percepción, porque en esta realidad, es lo contrario.
El máximo gestor de los elementos no puede hacerlo todo. Se ha anunciado el aumento, significativo del presupuesto para el Estado para el 2014, por lo que ya no debe haber más pretextos en cuanto a recursos. Lo que es verdad, es que, aún con este dinero, los problemas persistirán, ya que no se ha demostrado una capacidad correcta, de planeación, de ejecución y de conjunción en los artífices principales de la sociedad tabasqueña. Así, no importa que estén en el poder los próximos 200 años, si no tienen una percepción de los principales cánceres que aquejan a la población, si no tienen la capacidad, de un niño de primaria, para razonar y tener sensibilidad por este estado que les dio la oportunidad de gobernar, y por último, demuestran que el currículum que traen a sus espaldas, vale de algo, y no sólo es una lista de años y años y años y años y años… que parecen ser una losa pesada que impide su pleno desempeño físico y mental, en lugar de un cúmulo de experiencias para improvisar y diseñar respuestas fáciles a problemas difíciles.
De testigos.- En el Congreso ya irán a comparecer algunos de estos personajes, colocados en los puntos principales de la gestión de Arturo Núñez. Frente a los diputados, veremos cuáles son sus alcances, que al día de hoy, son más nulos que significativos.