GOBERNAR EN TIEMPOS DE CRISIS

FELIPA NERY

“El hombre vulgar espera lo bueno y lo malo del exterior, el hombre que piensa lo espera de sí mismo.” (Antón Chéjov)

El secretario de gobierno Raúl Ojeda Zubieta anunció  que él no terminará el ejercicio de gobierno con Arturo Núñez Jiménez. Es decir, que no le va a acompañar hasta el final en la administración, pues dice tener otros propósitos, reconoce tener una responsabilidad de estado, que dice cumple a cabalidad todo lo que a esto le obliga. En  entrevista con Chuy Sibilla, aclaró también que no tiene aspiraciones políticas, pero Ojeda confunde cuando dice: “yo creí en ese sueño que Andrés Manuel planteó, soy un hombre institucional, tengo una responsabilidad de estado y cumplo a cabalidad todo lo que esto obliga, pero creo que un proyecto de esa naturaleza, merece ser respaldado de manera personal.”, ¿qué significa esto, que no está de acuerdo con la forma en que se gobierna hoy en Tabasco, porque no es lo que planteo Andrés Manuel López Obrador?., a este hecho de que no pudiera concordar con la forma en que se dirige el gobierno, habrá que agregar, que el secretario de gobierno no tiene la fuerza que en otros tiempos tuvieron los secretarios de gobierno, porque  en esta administración hay quienes tienen mayor influencia que Ojeda, como sería el mismo secretario de Administración, Amet Ramos, o el secretario de Obras Públicas, Manuel Ordoñez, quienes ejercen presupuestos super millonarios, mientras que el recurso que ejerce hoy la secretaría de gobierno es mínimo, pero sí recaen en esta dependencia todos los problemas sociales que se viven en la entidad y a los que es difícil dar solución en estos tiempos, porque no se cuenta con los cajones llenos de millones de pesos para responder a los reclamos de los grupos que se manifiestan. Ojeda se ha dado cuenta de la dificultad de administrar hoy el gobierno, por eso prefiere salir antes, y quizá aspirar a una diputación federal en el 2015. Y es que ante la falta de recursos y las necesidades mayúsculas que hoy existen en la sociedad tabasqueña, este gobierno siente la dificultad por la falta de recursos económicos. Por un lado, para completar los gastos cobra el Impuesto Estatal Vehicular que se ofreció derogar, y la gente les reprocha la falta de cumplimiento de la palabra empeñada, y por el otro, ahora se dan cuenta que el presupuesto que tenían programado para este 2014 ya no les alcanza, porque las inundaciones  que les trajo Santa Claus en 2013 no las esperaban y ¡oh sorpresa!, que no tienen mil 750 millones de pesos para completar los recursos que le permitan al gobierno acceder al FONDEN para reparar infraestructura dañada. Ojeda dice: “tenemos que buscar de donde sea esos mil 750 millones de pesos”, ese de donde sea, significaría que  pellizcarán el presupuesto por todos lados, y  entonces  tendrán conflictos al no cumplir con lo que  habían proyectado;  lo mismo hizo el gobierno anterior,  tuvo que tomar dinero de una dependencia y de otra,  dejó sin medicinas, sin pagos de  prestaciones, porque el problema de las inundaciones fue recurrente y así seguirá, porque el problema de las inundaciones llegó para quedarse y cada vez nos golpeará más.