El gobierno federal y la percepción negativa

Por: José Martínez

La percepción negativa hacia el gobierno de Enrique Peña Nieto va más allá del 30% que le atribuye la más reciente encuesta publicada por el diario Reforma. La pobreza ha aumentado más de 2 millones en los últimos dos años, 55 millones de personas no han contado con las condiciones necesarias para que se pueda decir que su calidad de vida se mantiene en lo mínimo según los estándares marcados por la OCDE. Son datos objetivos, más allá de los “sentires”.

En un país donde el 97% de las denuncias de corrupción no proceden no se puede hablar de avances en materia de seguridad pública a nivel nacional o del combate al crimen organizado; es el país donde 92% de los ciudadanos padece la desconfianza, donde se violan los derechos humanos y sólo se prestan oídos sordos a las recomendaciones emitidas por los organismos internacionales en la materia. La cifra de más de 27 mil desaparecidos resulta escalofriante.

A pesar de todas estas cifras ´perceptivas´, sin incluir lo que en el rubro de la economía corresponde y afecta seriamente a nuestro país, aunque se presenten cifras que nos dicen que las cosas van por buen camino para inyectar algo de optimismo, el gobierno federal –en particular Peña Nieto- tiene que hacer frente a manifestaciones de rechazo incluso en otros países.

La desaparición de los 43 jóvenes en Iguala, Guerrero; las desapariciones forzadas y la violencia contra periodistas en Veracruz; los supuestos conflictos de interés del mismo Peña Nieto y algunos de sus colaboradores de alto nivel; la protección al ex gobernador Humberto Moreira, y los escándalos de lavado de dinero, el influyentismo, el desprestigio de la clase política en general, son un fantasma que pesa sobre la actitud ciudadana.

No obstante la crisis que enfrentamos los mexicanos tenemos que aprovecharla para buscar alternativas, y rediseñar las políticas que no nos han dado resultado. Sí, hay que moverá a la sociedad pero para hacerla más participativa en la toma de decisiones, dotarla de mejores estrategias para que hagan de la información una de las principales herramientas en busca de mejores resultados. La realidad no se puede simular. En Los Pinos comienzan a mostrar preocupación por los saldos rojos; no es para menos, a mediados del año próximo comienza en serio la cerrara por el relevo presidencial.

HABERES

ADÁN Augusto López Hernández por lo que se ve, es quien va por la gubernatura para el 2018 izando la bandera de Morena. Aunque nos confirman que entre sus filas de precampaña ya andan colgados algunos priistas. ¿Habrá alianzas entre ambos partidos políticos? No parece posible, aunque varios grupos del tricolor están viendo en los morenistas de López Hernández un paracaídas que les permita frenar su desplome hacia el 2018.

INTERESANTE el caso de Leyda López Arrazate quien asumirá como comisionada en el Instituto de Transparencia tabasqueño (ITAIP). Es militante del PRI en donde fue titular de la Unidad de Transparencia del Comité Directivo Estatal (CDE) y aspiró a la dirigencia del sector femenil priista. Tendrá que hacer un gran esfuerzo para mantener su participación en el ITAIP como garante de transparencia.

CIVILIZADO y fructífero fue el diálogo que Víctor Manuel López Cruz, secretario de Educación, mantuvo con los diputados locales a petición de la Comisión de Educación y Cultura encabezada por María Luisa Somellera, representante de Morena en el Congreso. Lejos del ruido y los reflectores, despejaron dudas, plantearon críticas y escucharon explicaciones.