Por: Marychuy Castillo
Tiempos aquellos en que la bonanza petrolera trajo a Tabasco, no solo población de otras partes de México, sino del mundo, cientos de paisanos se vieron beneficiados con negocios, rentas, ventas de inmuebles y todo lo que se podía comprar con los altos salarios que muchos tabasqueños también cobraban, los únicos afectados fueron los más jodidos, que continuaron igual. A la distancia, la administración de la ‘riqueza’ del petróleo no resultó muy buena y ahora todos pagamos las consecuencias. Nuestro Estado y su gente resiente, los estragos, la inseguridad, y falta de empleo, son dos de los jinetes del apocalipsis con los que se enfrenta la ciudadanía el llamado que hizo, durante la visita a Tabasco, a inicios de año, el Presidente Peña, por parte del gobernador Arturo Núñez para reactivar la economía y generar empleos, dio resultados y de nuevo, se dio la llegada de Enrique Peña Nieto el pasado miércoles, El Programa de Reactivación Económica y Desarrollo Productivo para los Estados de Tabasco y Campeche fue dado a conocer por el mandatario federal, La atención inmediata sobre la falta de liquidez que enfrentan las empresas de Tabasco y Campeche, Detener la caída de la actividad económica mediante el impulso a la inversión pública y la generación de empleo en el corto plazo, Promover la transformación productiva en la región en el mediano y en el corto plazo, Establecer esquemas de seguimiento y comunicación que den certidumbre a los actores económicos, son los cuatro puntos.
De testigos.- De las fotos, de delegados federales con el Presidente Peña resalta, la de Hernán Barrueta, titular de SEDATU, a quien el mandatario federal, le habló muy de cerca al oído, ¿se inclinaría acaso ya la balanza?
De acusados.- Tiempos aquellos en que muchos “periodistas” se peleaban los favores del gobernador Manuel Andrade, esos que ahora lo critican, lo denostan, por cualquier cosa, -hasta por el chiste más malo que contará- se revolcaban de la risa para quedar bien con el exmandatario! cuanta miseria humana¡, acuérdense que el tiempo y las circunstancias cambian de un momento a otro y Manuel , no olvida tan fácil.