No hay respeto a las madres

Por: Felipa Nery

Hoy se celebra en México el Día de las Madres. Como el día ha caído entre semana, muchos empezaron a celebrar a sus madres desde el pasado domingo, pero otros hijos, ni se acuerdan que gracias a una mujer que los llevó nueve meses en su vientre están hoy en esta tierra. En Tabasco, el deterioro de la calidad de vida que hemos vivido en los últimos años, sobre todo la pérdida de valores, que trajo aparejada la desintegración familiar, ha repercutido en mayor violencia hacia las mujeres. México ha ratificado instrumentos internacionales que protegen derechos de la mujer, y a partir de los mismos se han creado disposiciones normativas, como la Ley general de Acceso de las Mujeres a una vida libre de violencia, y todas las entidades han aprobado su respectiva ley, que replica esta general; además, se han creado instituciones especiales, como el Instituto Nacional y los estatales para atender todo tipo de violencia que sufren las mujeres, los cuales poco pueden hacer, no sólo porque se han convertido en una oficina burocrática más, sino que se argumenta falta de presupuesto para realizar mayores acciones que permitan promover los derechos de las mujeres; ni disposiciones normativas, ni instituciones públicas especiales para atender a las mujeres, han podido contribuir a contrarrestar todo tipo de violencias que sufren las mujeres. La mayor problemática que se conocía contra las mujeres, era la violencia que toleraban  en el hogar por parte de su pareja, esposo o concubino, que se sentía con derechos a castigarla, hasta que desde  los organismos internacionales, protectores de los derechos humanos, como la Organización de las Naciones Unidas y la Organización de los Estados Americanos, de donde surge de la Convención de Belen Do Pará, en 1994, en la que se reconoce que la violencia contra la mujer constituye una violación de los derechos humanos y las libertades fundamentales y limita total o parcialmente a la mujer el reconocimiento, goce y ejercicio de tales derechos y libertades; se definió asimismo a la violencia contra la mujer como una ofensa a la dignidad humana y una manifestación de las relaciones de poder históricamente desiguales entre mujeres y hombres. A pesar de todos estos instrumentos internacionales, nacionales y locales, nada ha contenido la violencia contra la mujer, por el contrario, en Tabasco, en especial, el menoscabo de la calidad de vida de la mujer ha crecido. Mayor violencia desde el hogar, la comunidad, y sobre todo estructural, violencia que viene desde las mismas autoridades. Las madres, son mujeres. Miles de madres, son mujeres violentadas, no sólo por parte de sus parejas, sino que hoy también reciben violencia verbal y hasta física, por parte de sus hijos, debido a este deterioro que ha venido padeciendo nuestra sociedad en Tabasco en los últimos 30 años, a partir de que se dio la pérdida de valores, donde las personas dejaron de preocuparse por el Ser como personas, y se ocuparon por el tener, sin importarles el cómo de sus fines. Por eso hoy, estamos en un callejón sin salida. Así es que esperemos que este 10 de mayo, muchos reflexionen en torno a la Madre, que les permitió estar en este mundo.