Peregrina Juan, con su violín

CARDENAS, TAB.- Él forma parte de ese sector de la sociedad, que enfermos y sin empleos, tiene que salir a auto emplearse para poder ganar unas monedas y llevar el sustento económico que le permita adquirir sus alimentos en forma honrada, y a  ser víctima de los delincuentes que acechan en cualquier calle de la ciudad  de Cárdenas.

Ahí sentado en la esquina que conforman las calles Francisco Trujillo Gurria y Jacinto López, se encuentra Juan Hernández Arenas, de 66 años de edad y con domicilio en la colonia “Jacinto López”. La sobra que proyecta una vivienda, sirve para que el músico se proteja de los devastadores rayos del sol, esos que aniquilan y no respetan estrato social.

Sus frágiles dedos, se desplazan por el violín, buscando armonizar las cuerdas para iniciar la jornada del día que perminta ganarse unas monedas entre  el público que transita de un lado a otro, con sus problemas y sus prisas. Ahí sentado, platica y comenta, que ya no se puede vivir en esta ciudad de Cárdenas, donde los delincuentes se esconden en cualquier esquina, incluso a él, quien a su edad dificultad logra ganarse al día entre 80 y 100 pesos que le donan quien escuchan su amigo inseparable que lleva con él 50 años, .

Don Juan Hernández, admite que a sus 66 años de edad y sin empleo, todo se le complica ya en la vida, pero no baja los brazos, pues en esta subsistencia por la vida, aun puede caminar acompañado de su frágil también amigo y colega su violín, quien también ya sufre los achaques propios del paso del tiempo como le sucede a él, sin embargo todo “remendado, sigue dando notas musicales.