Por: José Martínez
Parece que no dejamos de ver Tabasco como si fuera una isla, como si el resto de la Federación no existiera, y por ende cuanto sucede ‘las cosas negativas más que las positivas- las hacemos trascender a la par de la temperatura que caracteriza al trópico. Imagínense cómo percibimos las cosas que nos ocurren cuando viajamos al exterior y observamos el pedazo de tierra que algunos dicen amar férreamente. ‘Es mi agua’, expresan otros.
Sí, es verdad que nuestro Tabasco vive una situación excepcional en estos tiempos; es verdad que se acentúa un problema cuando se combate otro, que no puede erradicarse un mal sin que otro se esté arraigando. Sería irresponsable, y además improductivo, no aceptar la realidad que hoy tenemos.
Pero tenemos que voltear la mirada a todas partes y darnos cuenta que no estamos completamente solos, que incluso hay tabasqueños que viven repartidos en las partes menos imaginables de este mundo, y que ellos también perciben con las herramientas informativas de nuestra realidad globalizada, desde otra perspectiva, claro, sin que deje de dolerles la situación que enfrentamos no sólo los tabasqueños sino los mexicanos en general.
Hablamos de información, por lo tanto no podemos monopolizar las opiniones que se generan a partir de los hechos negativos que enfrentamos los tabasqueños; para ello tenemos que darnos a la tarea de recabar más información sobre uno o varios temas.
Desglosar, clasificar y contrastar con las muchas realidades que se perciben no sólo en Tabasco, también en otras partes de la República Mexicana. Tenemos que aceptar la variabilidad de los números y las estadísticas, sin olvidarnos que podemos contribuir con algo para mejorar la situación que vivimos.
Así, es importante informar con base en la comparación de datos para no enfrascarnos en polémicas que a ningún rumbo nos llevan. Para ilustrar un poco nuestro planteamiento: en lo que va de la actual administración federal (diciembre/2012-abril/2016), de 7,556 secuestros que se registran a nivel nacional 1,772 ocurren en el Estado de México, específicamente en el municipio de Ecatepec, según datos aportados por Alto al Secuestro, encabezado por Isabel Miranda de Wallace. Continuamos con 909 delitos en el mismo orden en Tamaulipas, 719 en Guerrero y 602 en la ciudad de México.
En el caso de Tabasco en 2013 se registraron 104 secuestros, 100 en 2014, 78 en 2015 y de enero a abril de 2016 van 23 casos de privación de la libertad contabilizados según las estadísticas que aparecen en www.secretariadoejecutivo.gob.mx. Si volteamos la mirada de nuevo al Estado de México donde Ecatepec ocupa el primer lugar con un número de 239 secuestros, seguido de Nezahualcóyotl con 152 tampoco es para que cantemos albricias por el crudo contraste con la situación que vivimos en nuestro Estado, la incidencia delictiva es variable y es algo que se tiene que atacar en un punto neurálgico pero no sólo contemplando nuestra entidad sino todos los estados del país.
Los índices varían entre regiones a medida que avanza el tiempo. Vemos que la inseguridad es generalizada y nadie puede celebrar cifras o saldos blancos. Es una batalla permanente.
HABERES
GERARDO GAUDIANO PRESENTÓ A LOS HOMBRES y mujeres que lo acompañarán en su tarea como presidente municipal. En esta encomienda tan disputada en los órganos electorales, no queda más que desearles suerte; sin embargo, como él mismo anunció, cada tres meses estará evaluando al equipo, y si alguien no cumple con las expectativas será removido. La advertencia ahí queda. Pancho Peralta ya demostró que cuando se quiere se puede, y sin dejar.
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