CUNDUACAN, TAB.- Triste panorama viven productores de pimienta en el municipio debido a la falta de comercialización, el cierre de sus oficinas de acopio, la desforestación, y sin mercado para venta del producto, pues tienen que hacer prestamos con intereses para pagar y poder cortar, desgranar y secar los granos para vender el condimento en otros municipios al no contar estos con dirigente desde el 2009.
En este municipio la Unión de Productores de Pimienta contaba con un padrón de más de 200 socios, los cuales entregaban desde 1962 su producto que rebasaba las 100 toneladas por zafra, cambiando sus dirigentes democráticamente en periodos de dos años, fue hasta el 2009 que se estableció a Benito López Landero quien se reeligió tres veces.
Señalan que sobreviven ya que en el 2009 las oficinas de acopio fue cerrada, y el edificio sigue en su domicilio, solo para cubrir el requisito hacendario, debido a que ya no era un producto redituable por las escasas entregas.
José de la Cruz Coronel, Urbano Álvarez y Manuel Madrigal, son campesinos que viven en la Villa de Jalupa, quienes dejan sus siembras de maíz de manera momentánea mientras maduran las mazorcas, para dedicarse a la comercialización de la pimienta.