Jóvenes, cultura democrática y cambios sociales

Por: José Martínez

Sin duda que el 2 de Octubre figura en la conciencia de los mexicanos como el momento trágico en el que el poder se cerró al reclamo de los jóvenes estudiantes. La sordera en la cúpula puede llevar a callejones sin salida. En el caso de Tabasco, me parece que el tema de los jóvenes preocupa a este gobierno. Ayer nos referimos en cierto sentido a este contexto.

Vale preguntarse: ¿Son los jóvenes realmente el futuro? No. Creo más bien que son el presente, porque están aquí, de carne y hueso.

Durante algunas épocas los han identificado en diversas generaciones, como la “grandiosa o vieja guardia”, “la silenciosa o la de los promotores”, “la Baby Boomer”, “la X o Bumerang”, “la generación Y”, así como “la generación Z”.

Hoy están inmersos en ese mundo global de la tecnología, atrapados entre el celular y una computadora, viajando con diversos programas a través del mundo, por lugares oscuros, donde el tiempo para ellos no importa.

Hacía referencia al principio sobre el interés del gobernador Arturo Núñez Jiménez por ver a esta generación más preparada, comprometida y responsable consigo misma; la oportunidad de un relevo generacional, como a él mismo le tocó a finales de los sesenta y principios de los ochenta.

Al propio Instituto de la Juventud, por ejemplo, Núñez planteó el desafío de impulsar políticas públicas para generar opciones para realizarse en lo individual, y que ayuden de manera firme a este segmento poblacional. Otro aspecto interesante es el de “Cambia tu tiempo”, para involucrar a los adolescentes y jóvenes en acciones sociales.

Otro rubro que fortalece, desde la arena participativa, son los concursos de cultura democrática. Va en su tercera edición, con el objetivo de expresarlas ideas y afanes a través de un ensayo. Lo organiza la Secretaría de Gobierno, a través de la Subsecretaría de Desarrollo Político. Una oportunidad para reflexionar sobre la cultura de los derechos humanos, participación ciudadana, democracia, igualdad de género, entre otros temas. Que los jóvenes vean su realidad, propongan, diseñen, creen, y dispongan del uso de la voz y la escritura para señalar qué sucede hoy en Tabasco.

Arturo Núñez dijo en alguna ocasión en un encuentro con los jóvenes: “deben prepararse cada día para entender el mundo en el que están inmersos; luchar para recuperar instituciones que no pasen de moda, como la familia; y fortalecer valores en aras de tener una sociedad más justa e igualitaria”.

Comentó que la población en general vive un cambio vertiginoso de las cosas, una cultura del “úsese y tírese”, que también ha provocado que se pierdan principios que pasadas generaciones asimilaron. “Tenemos problemas en nuestro tejido social y los jóvenes nos pueden apoyar mucho para recuperar valores perdidos”, indicó.

Existe un claro desinterés por este segmento, podría decir que un grupo conocido como Ollin, Jóvenes en Movimiento. A.C., señaló que hay una apatía, y sostiene, de acuerdo a sus estudios de investigación, que a sólo tres de cada diez les importa.

Hay que colocar puentes, evitar que la zanja se agrande, lograr integrar a los jóvenes en los proyectos de cambio. Romper la vieja inercia de usar a la población sólo para llenar urnas.

HABERES

EL DIPUTADO Manuel Andrade Días salió a defender lo indefendible. Dijo que es difícil que a José Eduardo Rovirosa se le quite la alcaldía. A pesar del abuso y la autopromoción sancionada por la ley. El Tribunal de los Contencioso Administrativo ya le puso lupa al macuspanense.