Garantizar la seguridad de la gente

Por: Víctor M. Sámano Labastida

Los mexicanos necesitamos un Estado fortalecido en la democracia, que cumpla con su función esencial: garantizar la seguridad de la gente, sostiene Enrique González Pedrero, ex gobernador de Tabasco, estudioso de la teoría política y experimentado en la práctica del poder. “Hay que fortalecer al Estado –insiste-; la protección de la población es indispensable para el desarrollo”.

El también ex senador y ex embajador, autor de más de una decena de libros y numerosos ensayos, recibió este año un reconocimiento del Instituto de Administración Pública en una circunstancia muy especial: de manos del gobernador Arturo Núñez y una presea que lleva el nombre de otro ex gobernador, Mario Trujillo (1971-1976).

EXISTIR, LUEGO DESARROLLAR

Víctor M. Sámano.- A propósito del premio que recibe, ¿cuál es el principal desafío para la administración pública?

Enrique González Pedrero.- Vamos a decirlo matizadamente: hay que fortalecer al Estado. Su origen es garantizar la seguridad de sus ciudadanos, de la ley de la selva pasar a la ley de la civilidad. Se crea para eso en primerísimo lugar. Después vienen otras muchas tareas, pero la fundamental es la seguridad.

VMS.- ¿Hay algún momento de quiebre de este papel?

EGP.- En el momento que no se garantice la seguridad algo está fallando.

VMS.- ¿Se necesita una refundación del Estado?

EGP.- Se puede llegar a eso, yo espero que no estemos en esa situación.  Hay que escuchar las voces de la gente, las voces de los estados federados.

VMS.- Insisto, ¿por qué la seguridad?

EGP.- La fortaleza del Estado es indispensable para el desarrollo. Para poder desarrollar algo primero tiene que existir. La vitalidad viene de la propia fortaleza y de tener conciencia de la tarea que tiene que realizar. Nuestra tarea es garantizar la existencia de México, de nuestro país, y eso sólo es posible con un Estado fuerte.

VMS.- ¿Que haya autoridad, que haya instituciones?

EGP.- Sencillamente eso. Y no me parece que el ejército sea la vía. Claro, se ha tenido que recurrir por emergencia, pero lo ideal es tener fuerzas de seguridad propias, policías dedicadas a la tarea de la seguridad de los ciudadanos. El ejército es para garantizar la existencia del Estado en caso de una conflagración, de una guerra, porque está para defender y pelear; la policía en cambio tiene tareas distintas. Poner al ejército en funciones para las que no está hecho ocurre lo que en algunos casos y luego viene la queja. Lo que necesitamos son fuerzas policiacas bien instrumentadas. Cuidar la soberanía del Estado. Don Jesús Reyes Heroles decía: el ejército a donde debe estar, en los cuarteles y para los desfiles, para no hablar de la guerra.

VMS.- ¿Mejorar las policías en las comunidades?

EGP.- En la medida que la policía tiene que jugar ese papel. Pero creo que las tareas fundamentales no sólo son policiacas, no solo con las armas y con el garrote, sino en la creación de empleo, en el combate a la desigualdad. Es decir: ir cumpliendo con otras tareas del Estado que también son primordiales. Garantizar las demás funciones: vivir y vivir de la manera más humana posible, para ello hay que tener garantizar la ocupación, la comida, la salud, todos los elementos indispensables para la vida en común, la vida pública bien conducida.

VMS.- Hay quienes pensarían que fortalecer al Estado daría lugar a un sistema autoritario.

EGP.- Por eso yo diría que se trata de tener un Estado democrático, que sería muy fuerte si está sustentado en la voluntad de sus ciudadanos, y esos ciudadanos son los garantizan la existencia y fortaleza del Estado. Por eso reitero: escuchar a la gente, darle seguridad. (Mañana: Hay que mirar al campo, fortalecer a los municipios.)