Antes de llevarse a cabo la ceremonia de investidura como el presidente 45 de los Estados Unidos, Donald Trump enfrenta de última hora una demanda judicial por difamación interpuesta por Summer Zercos en un juzgado de Nueva York.
Asimismo, Trump enfrenta también uno de los peores índices de popularidad en comparación con los últimos seis presidentes de Estados Unidos al momento de asumir el poder; tiene solamente un 40 por ciento de estadounidenses que tienen una opinión favorable.
Cabe señalar que el mandatario saliente Barack Obama tenía 79 por ciento al inicio de su mandato, uno de los más altos en los últimos tiempos. George W. Bush tenía 62 por ciento de aprobación, Bill Clinton 68 por ciento, George Bush padre 65 por ciento, Ronald Reagan 58 por ciento y Jimmy Carter 78 por ciento.
También arrancaron las marchas de repudio en toda la nación, hay llamados de estudiantes a paralizar las clases este viernes 20 de enero, a pesar de poder ser objeto de sanciones porque ese mismo día tendrán un examen muy especial.
Incluso, ha aumentado el número de congresistas que harán un boicot de ausencia a la ceremonia inaugural; suman más de 50, especialmente los demócratas que declararon no asistir a la toma de posesión de Trump.
Una ceremonia que le costaría al contribuyente más de 100 millones de dólares.
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