Por: José Martínez
Con la demolición del mercado Pino Suárez, a partir de ayer, quedaron atrás más de 50 años de historia. Los recuerdos, sobre todo, se llevarán al hombro y en la mente de cada uno de los comerciantes, que incluso nacieron ahí.
El emblemático centro de abasto que abría sus puertas desde las cuatro de la mañana para darle entrada a quienes así lo dispusieran para realizar sus compras, cerró sus puertas.
Formado en sus inicios como un galerón con techo de dos aguas, con bastante luz y ventilación y de elevada altura, acorde al clima de Tabasco, adornado con sus comedores, abarrotes, carnicerías, pescadería, vísceras, aves de distintas especies y sabores.
El Pino Suárez, como se le conoció, será remodelado bajo un anuncio que hizo en su momento el gobernador Arturo Núñez Jiménez, a petición de los comerciantes, quienes en dos ocasiones, en el Día del Locatario se lo solicitaron.
La construcción tendrá un costo aproximado de 280 millones de pesos, sin embargo, luego buscar el financiamiento y madurar el proyecto, vino la etapa de la discordia, del sabotaje, de esa mala costumbre de algunos tabasqueños para no dejar avanzar los trabajos.
En un año de negociaciones, se dieron diversas reuniones, tanto en el inmueble como en dependencias de gobierno, donde no se llegaban a los acuerdos que pudieran dar pie a iniciar con la demolición.
Diputados del PRI, como Manuel Andrade Díaz, Jorge Lazo y Adrián Hernández Balboa, dieron la batalla para inyectar ideas que no iban con la realidad, provocando que un grupo de comerciantes, que igual mantenía sus negocios de giros negros en el mercado cerraran los candados.
Luego de marcar varios plazos en el calendario para su demolición, el tiempo se iba alargando, a tal grado que se corría el riesgo de perder el apoyo económico por parte de la federación.
En este camino, parecía que nada se podría lograr, que el anuncio del gobernador desaparecería.
Afortunadamente, un 99 por ciento de los locatarios entendieron que sí es necesaria la remodelación, darle otra cara al inmueble es sinónimo de contar con un mercado moderno y versátil, que sirve para el desarrollo de Tabasco.
El plazo quedó vencido, y en dos años aproximadamente reaparecerá el nuevo Pino Suárez, lo que significa que no es un adiós sino la espera para un moderno mercado, donde se pueda acudir otra vez a comprar y redescubrir parte de la historia del estado.
HABERES
ANDRÉS Manuel López Obrador estuvo en Tabasco donde tuvo casa llena. A la entidad trajo la firma del Acuerdo Político de Unidad por la Prosperidad del Pueblo y el Renacimiento de México. El dirigente de Morena hizo lo propio en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, donde participaron empresarios, ganaderos y sociedad civil. Luego de estar en la entidad, AMLO tendría una próxima parada, Estados Unidos, para reunirse con los migrantes.
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