Por: Felipa Nery
El pasado lunes la señora Emma Gabriela Molina Canto, fue asesinada en las puertas de su domicilio en el vecino estado de Yucatán. Y qué importancia podría tener el homicidio de una mujer más, si en el país a diario son asesinadas por lo menos seis mujeres por distintas causas violentas, lo que representa un número de 180 al mes, o más de 2 mil mujeres al año, que son violentadas, principalmente por sus parejas o ex parejas. Es de importancia, porque se trata, de una mujer que luchaba por tener a sus tres hijos con ella y porque su ex esposo y padre de sus hijos, Martín Medina Sonda, es un hombre que estuvo involucrado en actos de corrupción durante la administración anterior y fue señalado de trasladar en una avioneta, en 2007, durante la inundación que padeció Villahermosa, unos ocho millones de pesos, caso en el que fue involucrado con el entonces secretario de Finanzas, José Manuel Sainz Pineda. Posteriormente, se supo que este sujeto también tenía problemas con la ley por la sustracción de sus menores hijos, que le habían sido arrebatados a su madre en Yucatán, por la fuerza; fue un largo litigio, en el que Medina Sonda logró llevar a la cárcel a su ex mujer, acusada de sustracción de un vehículo; la señora sufrió del hostigamiento no sólo por parte de su ex esposo, sino también de los familiares de éste; tanto la señora Emma Gabriela, como su madre, abordaron al Presidente Enrique Peña Nieto en una gira por Yucatán, a quien le solicitaron su intervención, mismo que turnó el caso al Instituto Nacional de las Mujeres; también buscaron el amparo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, la cual envió recomendación al gobierno de Yucatán para dar protección a la señora Emma Gabriela, sin embargo, las autoridades de Yucatán no se la brindaron, a pesar de que tanto la señora Emma Gabriela, como su madre Ligia Canto, denunciaron en varias ocasiones que eran amenazadas, acosadas y perseguidas de manera constante, y las autoridades sólo se concretaban a decirles que cualquier agresión que sufrieran la denunciaran. El resultado de la negligencia de las autoridades, es el que ya todos conocemos, la privación de la vida de la señora Emma Gabriela, por parte de dos hombres jóvenes que no pasan de los 25 años de edad, originarios de Tabasco, sin domicilio en Yucatán, por lo que la madre de la víctima, la señora Ligia Canto acusa de ser los autores intelectuales de este feminicidio, tanto al ex esposo de su hija, Martín Medina Sonda, como a los padres de éste, pero también a las autoridades de Yucatán que no le brindaron la protección que la CNDH había recomendado. Este es un caso más de los feminicidio que se dan a causa de los odios que se generan entre las parejas que un día se amaron, pero que al terminar esta relación sus vidas se convierten en un infierno, donde no sólo se dañan a ellos mismos, sino a sus pequeños hijos, a los parientes de ambas familias y muchos terminan en tragedias como esta.
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