Por: José Martínez
El 22 de diciembre del año 2010, Iván Hillman Chapoy fue nombrado Secretario Técnico de la oficina del hoy ex gobernador veracruzano Javier Duarte Ochoa.
Hillman Chapoy, maestro en Administración Pública, estuvo como presidente municipal de Coatzacoalcos entre los años 2005-2007, y luego funcionario en dependencias del Poder Ejecutivo federal y del Poder Judicial de la federación, así como dentro del mismo gobierno de Veracruz. Toda su carrera en la administración pública lo hizo cobijado a la sombra del PRI, en especial de Fidel Herrera y de Javier Duarte.
En los últimos años Hillman Chapoy laboró en la delegación de la CONAGUA en Veracruz. En agosto del año 2016 llegó a Tabasco proveniente de ese estado a raíz de un enroque que realizó la gerencia nacional, enviando al entonces delegado de Tabasco a Veracruz, y al de Veracruz lo pasó a esta entidad.
Sin embargo, Iván Hillman Chapoy, ya venía marcado, porque no comprobó el uso de mil 500 millones de pesos, además de presuntas irregularidades en la aplicación de dos programas federales aplicados en aquella entidad durante los años 2014 y 2015.
Hillman estuvo en Tabasco menos de un año. El 31 de julio de este año presentó su renuncia por asuntos estrictamente personales, a como justificó en su escrito de renuncia difundido ese día por la dependencia federal. Su estancia al frente de la delegación de la CONAGUA pasó con más pena que gloria, ya que en ese tiempo el PROHTAB, el actual programa contra inundaciones en Tabasco, se vio afectado con un recorte presupuestal de casi 500 millones de pesos.
Para algunos ambientalistas su renuncia obedece a que lo están llamando a cuentas por la “cola” que dejó en Veracruz, y donde la Auditoría Superior de la Federación (ASF), ya estaba investigando. En algún tiempo sabremos las verdaderas razones que orillaron al veracruzano a dejar la delegación en Tabasco.
Hillman Chapoy se suma a la lista de los delegados que llegan a Tabasco, y que se han visto envueltos en irregularidades, sobre todo, del manejo de recursos públicos que administran.
Quién no recuerda a Omar Celim Komukay Puga, famoso por cerrar un antro cercano al malecón, y cuyas cuentas pagaban algunos empresarios amigos de él, o de Jorge Octavio Mijangos, quien llegó a Tabasco con señalamientos en su anterior responsabilidad dentro de la CONAGUA, y que dicen las malas lenguas perdió todo por una tabasqueña.
El antepenúltimo, Antonio Gutiérrez Marcos, no estuvo exento de señalamientos. De alguna forma todos se han visto envuelto en una serie de irregularidades en el manejo de los recursos destinados a las obras contra inundaciones que se realizan en Tabasco.
Basta ver las cuatro demandas penales que ha interpuesto la ASF en contra de funcionarios públicos de la CONAGUA, y por el uso de documentos falsos en la comprobación de recursos del “Programa Integral para la Construcción y Rehabilitación de la Infraestructura Hidráulica de Protección de Áreas Productivas, y Centros de Población en la Cuenca del Río Grijalva, en el Estado de Tabasco”. Algo de lo que ya dimos cuenta en este espacio.
La CONAGUA se ha convertido en Tabasco casi en su “banco”, una caja chica, para manejar y gastar millones de pesos, sin que la federación haga observaciones…
HABERES
EL GOBERNADOR Arturo Núñez afirmó que concluirá su periodo como jefe del Ejecutivo estatal, porque -sostuvo- no tiene la cultura trepadora. “Cualquier otra tarea puede esperar, porque para eso me preparé, para servir a los tabasqueños”, agregó ante las especulaciones de que podría interrumpir su mandato y asumir otro encargo.
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