El que siembra vientos…

Por: Felipa Nery

Dice por ahí el refrán popular, que el que siembra vientos, cosecha tempestades y eso precisamente es lo que hoy le está pasando en su país al presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, Donald Trump,  quien después de los hechos violentos en la ciudad de Charlottesville, en el condado de Albemarle, Virginia hizo el siguiente llamado a la población:  “Todos debemos estar unidos y condenar todo lo que representa el odio, porque no hay razón para este tipo de violencia en América, vamos juntos como uno”. El magnate blanco, alto, multimillonario, que en su campaña de pronunció en contra de los migrantes, tanto musulmanes, como latinos, en especial mexicanos, a quienes acusó de ser los responsable de los males que vive su país, como el desempleo y la violencia, ofreció: “el crimen y la violencia que hoy nos aflige muy pronto va a terminar”, pues anunció una deportación masiva de los indocumentados; sin embargo, hoy le  ocurre todo lo contrario, la violencia que ofreció terminar, se desata por sus discursos. La violencia del pasado sábado que dejó tres muertos y unas dos docenas de heridos de gravedad, inició con una marcha de los “supremacistas blancos”, encabezados por David Duke, quien habría declarado a CNN: “vamos a cumplir con las promesas del Presidente Trump y retomar el país”. Y es que ahora se reviven algunas frases racistas de Trump, quien ha señalado: “este es un país en el que hablamos inglés, no español”, y otra que dijo en un mitin de campaña en Iowa: “Podría disparar a gente en la Quinta Avenida y no perdería votos”. Mientras los “supremacistas blancos” marchaban en protesta por el proyecto de retirar una estatua del general Robert E. Lee, quien luchó a favor de la esclavitud de los negros durante la Guerra Civil, un grupo de opositores a los “supremacistas blancos” también se manifestaban, lo que provocó enfrentamientos a golpes, con palos y piedras, por lo que un joven blanco aceleró el vehículo que conducía en contra de los opositores a los supremacistas, causando la muerte de una mujer joven, así como unos 26 heridos, las otras dos muertes se registraron por parte de los policías, al caer un helicóptero que rondaba la zona. Este es el resultado de lo que Donald Trump promovió en campaña, el racismo, el odio a los migrantes tanto latinos, como musulmanes, sin saber que lo único que hacía era reavivar las llamas del fuego que ha ardido en ese país, desde siglos atrás, del odio de los blancos hacia los negros, a quienes mantuvieron en la esclavitud, a pesar de que en su declaración de independencia, de Inglaterra en 1776, la justificaban entre otros motivos, por la búsqueda de la vida, la libertad y la felicidad del pueblo, pero esta felicidad sólo era para los blancos, porque los negros, no contaban, esos, siguieron siendo esclavos, hasta 1863 que el presidente Abraham Lincoln proclamó la emancipación de los negros y dotaba a todos los ciudadanos de los mismos derechos y privilegios, sin distinción de raza, pero esto fue sólo en el papel, porque en la realidad, la lucha seguía, en los años sesentas del siglo XX, Luther King  luchaba en contra del racismo hacia los negros, y al día de hoy, esta lucha continúa y se agrava con la llegada de Trump al poder.