En la impunidad, 97% de casos de violencia contra periodistas

El periodista Marco Lara Klahr disertará hoy la conferencia ‘Desafíos del periodismo judicial ante el escenario 2018: Militarización, populismo punitivo y seguridad de los periodistas’, en punto de las once horas en el salón La Troje del Hotel Viva.

A invitación de la Asociación Tabasqueña de Periodistas, en el marco de sus 61 aniversario, el especialista en el tema judicial, adelantó que en su plática uno de los temas será las proyecciones del ejercicio periodístico de la perspectiva de 2018, en la etapa previa, durante y después.

Además, hará una exposición de cómo está la situación de manera general del periodismo en México, como una suerte de compendio de los diagnósticos que hay de la libertad de expresión asociada al ejercicio periodístico, y enfocada en los problemas estructurales que afectan al gremio.

Abundó que trazará algunas líneas sobre los riesgos podría haber para la profesión, sobre todo en un país donde hay una crisis de violencia e inseguridad y criminalidad persistente, que prácticamente está estacionada con más de un cuarto de siglo.

‘Hay información preocupante de lo que está pasando en México, lo que podría suceder con la contrareforma penal, lo que podría implicar la creación de la Fiscalía General de la República, en sustitución de la PGR, y otro problema es la Ley de Seguridad Interior, que implicaría radicalizar el proceso de militarización en el que ha vivido el país’.

Señaló que gran parte de las suertes de violencia hacia los periodistas son las políticas editoriales, ‘y nosotros nos quedamos expuestos, a fuego cruzado; y la gente nos ve como un medio, pero nunca tenemos mayor voz o capacidad de incidencia en la línea editorial, estamos en la indefensión’.

Detalló que más del 97% de los casos de violencia en contra de los periodistas están en la impunidad, y lo mejor que se puede hacer es avanzar en la clarificación de los casos.
En el caso Tabasco destacó que no es un estado donde los y las periodistas estén especialmente amenazados como Veracruz, Guerrero, Chihuahua, Sinaloa y Tamaulipas.

‘Necesitamos encontrar formas o líneas discursivas que nos permitan reducir riesgos, cómo generar mecanismos de interlocución con las organizaciones, los partidos, la policía, con el fin de generar condiciones de respeto hacia nuestro trabajo’.