En entrevista el gobernador del Estado, Arturo Núñez Jimenez, señalo que los cambios en el gabinete presidencial no traerán consecuencias negativas para Tabasco.
En este sentido el mandatario tabasqueño señalo que cree en la frase del respeto al partido ajeno es la paz, por eso se limitó a responder, “No tengo una opinión qué emitir sobre los procedimientos del PRI”.
Dijo conocer desde hace mucho tiempo a José Antonio González Anaya quien quedó en lugar de José Antonio Meade Kuribreña, “Es de Coatzacoalcos, es de la región y se lograron coordinar el tiempo que estuvo en Pemex. La mayor parte del equipo hacendario permanecerá en sus puestos, no hubo mayor movimiento cuando la salida de Luis Videgaray, y supongo que no los habrá entre José Antonio Meade y José Antonio Gonzales Anaya”.
Indicó que el único pendiente que queda es el ejercicio del presupuesto 2018, pero a través del secretario Amet Ramos y subsecretario Fernando Galindo, se están trabajando.
En cuanto a las comparecencias, dijo que la intención es ampliar la información entre el informe sintetizado del gobernador y el explayado al congreso, además de atender las dudas y cuestionamientos de los diputados.
“Si alguien pretende usar las comparecencias para efecto de denostar políticamente, con pleno respeto cada servidor público sabrá responder”.
Además refirió que a como le pidió la Federación, el gobierno del Estado se pronunciará a favor de la tarifa baja para Tabasco, “es algo que el Estado hace suya, ya instruí al secretario de Energía, Ricardo Fitz Mendoza como al secretario Amet Ramos, que se coordinen con el diputado Candelario”.
Cuestionado sobre si la reunión con Juan Manuel Fócil Pérez será para cicatrizar el rompimiento que existe, el mandatario expresó, “cicatriz si hubiera herida, estamos en constante dialogo con él y con todos los legisladores, y con todos los perredista. Por mi parte no hay fijón alguno.
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