Luis García
La modernización de la secretaría de Educación del Estado, SETAB, fue a lo que se comprometió el actual titular de la dependencia, Guillermo Narváez Osorio, en entrevista realizada con el comunicador Emmanuel Sibilla Oropesa, donde además dejó al descubierto lo que se venía diciendo por los corrillos no sólo de la dependencia, sino en todo Tabasco, el desaseo en el que se había actuado dentro de esa área tan importante para el desarrollo, primero educativo y segundo político del Estado. Lo que se dejaba ver a todas luces, en la forma prepotente y soberbia con la que actuaba el hoy ex secretario de esa dependencia Ángel Solís Carballo. El desorden financiero existente en la SETAB es superior a los 500 millones de pesos. 300 por la falta de pago a diversos trabajadores, recursos que el gobernador actual, Adán Augusto López Hernández tuvo que gestionar para pagar precisamente el día 15 pasado. Los otros 200 que aún no se consiguen y que tienen que ver con las cuotas de Seguridad Social. Se imaginan, el Estado auto robándose, pues el presidente de la Junta Directiva del ISSET era el mismo secretario de Finanzas, Amet Ramos Troconis. De acuerdo a los datos proporcionados por el propio maestro Narváez Osorio, existen fuertes irregularidades, desde el 2012, se imaginan desde el primer año de la fallida administración nuñista, a grado tal que todavía Víctor López Cruz, se encuentra comprobando o tratando de salir adelante con algunas cuestiones administrativas. Otro gran problema que presenta la dependencia que lleva el sector magisterial es los pagos por demandas laborales, pues hay un total de mil 140, de las cuales 75 están pérdidas y cuantificadas, haciendo un total de 58 millones de pesos los que tiene que pagar la dependencia, hasta hoy, más lo que se acumule con el paso del tiempo. Porque tanta mala fe de quienes estuvieron ahí. Se sabe de antemano que el nefasto “maestro”, así entre comillas, Solís Carvallo, corrió a muchas personas que llevaban años laborando con el único objetivo de colocar a sus incondicionales, lo que provocó una andanada de juicios laborales que en ningún momento tomaron con interés a grado tal de dejar correr las cosas. Todavía en el mes de diciembre, se vieron obligados a reinstalar a personal administrativo que desde hace tres o cuatro años fueron rescindidos. La promesa era la reinstalación, pero además el pago de los salarios caídos, esto último al parecer no lo hicieron y la cuenta sigue subiendo. La realidad es que fue en el último tramo de la administración pasada en donde se agudizo más el problema en la SETAB, pues el valemadrismo de Ángel Solís y la prepotencia de su personal de confianza, lo único que provocó el odio y rencor del personal. Lo anterior le está saliendo muy caro a los tabasqueños, ahora Guillermo Narváez Osorio y todo su equipo de especialistas en finanzas y modernización tecnológica tendrán que abocarse a resolverlo. Claro, primero es lo primero, el saneamiento de las finanzas de la golpeada Secretaría. Conociendo la capacidad del ex presidente del Tribunal Superior de Justicia, no dudamos que se logre, pero el camino es largo y los profesores y administrativos deben de entenderlo.
AL CIERRE.- Una auditoria a la nomina de la Secretaría de Educación se aproxima. Los profesores aviadores y de doble plaza al escuchar eso, se pusieron a temblar. El mensaje a los sindicatos es: “Yo voy a barrer mi casa, ayúdenme barriendo la suya”…Otro mensaje, el de Marco Rosendo Medina a burócratas: “la administración estatal no tolerará que nada ni nadie violente el estado de derecho”, esto luego de que un grupo de ellos bloquearon Ruiz Cortines y Paseo Tabasco, mando a desalojarlos…Por hoy es todo, nos leemos el lunes..
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