Pero las leyes son justas?

Felipa Nery

En la mitología griega, Antígona desobedece las órdenes del  rey Creonte, quien ordena que Polinices, hermano de Antígona no sea enterrado dignamente y se tire en las afueras de la ciudad para que lo devoren los buitres y los perros, a pesar de que las disposiciones divinas establecían que el alma de un cuerpo que no era enterrado, quedaba condenada a vagar por la tierra eternamente, por lo que Antígona decidió obedecer las disposiciones divinas y desobedecer al rey, al enterrar a su hermano y hacerle los ritos griegos acostumbrados. Por transgredir las disposiciones del rey, Antígona es condenada a ser sepultada viva, pero antes de ser sepultada, ella se suicida, ante este hecho, Hemón, hijo del rey Creonte, quien era prometido de Antígona, intenta matar a su padre y luego se suicida abrazado a Antígona, en tanto que Eurídice, esposa de Creonte y madre de Hemón, se suicida al saber que su hijo ha muerto. Las muertes de su hijo y esposa, acarrean la desdicha del rey Creonte, quien se arrepiente de sus arbitrarias decisiones para mantener su soberanía por encima de las leyes divinas. La anterior tragedia, viene bien, en torno a las declaraciones que ha hecho el secretario de gobierno, Marcos Rosendo Medina Filigrana, quien parece ser se ha convertido en el “secretario de hierro”, al decir que hará que se cumpla la ley estrictamente y no sólo lo dijo el pasado fin de semana, cuando anunció que procederán en contra de los taxis y las motos uber, sino que así lo ha dicho después que se dispersó a los burócratas que se manifestaban en Paseo Tabasco y Ruiz Cortínez. Mi apreciado Marcos Rosendo, por supuesto que estamos a favor de que en Tabasco haya orden, después del caos en el que nos dejó la administración anterior, pero este gobierno debe de ser sensible, no abusivo, ni inhumano, como el que acaba de  terminar, que reprimió y golpeó a quienes reclamaban un derecho, como a pobladores de Tamulté de las Sabanas, maestros e indígenas. En el caso de los ubers taxi y motos, muchas personas han encontrado la oportunidad de emplearse dignamente, ante la grave crisis de desempleo que existe en Tabasco y que nos ubicó en primer lugar a nivel nacional. Lo correcto sería llamar a la empresa y acordar el cumplimiento de las normas, que permita a la secretaría de Normatividad regular a quienes conduzcan un uber, pero que se haga, cumpliendo la ley, que no se permita que los conductores sigan pagando sobornos para obtener los permisos para conducir una unidad del transporte público, a sabiendas que no son aptos, y sobre todo, porque son un peligro para las personas que usan el transporte público. El Presidente Andrés Manuel ha dicho en el caso del combate al robo de combustible, que primero se buscará dar oportunidades de empleo a quienes se dedican a esta actividad ilícita, y no encarcelarlos. ¿No sería conveniente procurar lo mismo aquí en Tabasco, mi apreciado Marcos Rosendo?.