México país peligroso para periodistas

Felipa Nery

La libertad de expresión, es una de las características esenciales para que pueda existir un estado democrático. En México esta libertad no existe desde hace muchos años, México se ha convertido en uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo. La Comisión Nacional de Derechos Humanos tiene contabilizados del año 2000 a la fecha, 144 periodistas asesinados, de los cuales, cinco han sido asesinados en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. La libertad de expresión es un derecho humano consagrado en nuestra Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en el artículo 6º. Dice: “La manifestación de las ideas no será objeto de ninguna inquisición judicial o administrativa, sino en el caso de que ataque a la moral, los derechos de tercero, provoque algún delito o, o perturbe el orden público”. La Declaración Universal de los Derechos Humanos en su artículo 19 establece: “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”; asimismo, el artículo 19 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos consagra la libertad de opinión y de expresión; por su parte la Convención Americana sobre Derechos Humanos establece en su artículo 13: “Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento y de expresión. Este derecho comprende la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de toda índole, sin consideración de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o en forma impresa o artística, o por cualquier otro procedimiento de su elección”. De acuerdo a nuestra misma Constitución Política, en el artículo 4º. Define: “Es voluntad del pueblo mexicano constituirse en una República representativa, democrática, laica y federal”. Esta definición está lejos de ser una realidad, en relación a la característica de democracia, que no significa sólo el derecho de acudir a las urnas y emitir el voto en tiempos electorales para elegir a las autoridades que conforman los distintos órdenes de gobierno, sino que el término de democracia va más allá, es permitir la participación libre y auténtica de todos los ciudadanos de opinar y tomar parte de los asuntos políticos de su país, y para ello, es fundamental la libertad de expresión, que junto con los demás derechos humanos reconocidos en nuestra Constitución y otros instrumentos internacionales que México se ha comprometido a respetar, permiten que el ser humano pueda vivir dignamente. La libertad de expresión, al igual que otras libertades, como la de seguridad jurídica, de tránsito, de seguridad social, son derechos humanos en los que en vez de avanzar, hemos ido en retroceso en nuestro país en los últimos años, por distintas causas, principalmente la corrupción que fue permitida, tolerada y practicada por los altos funcionarios de gobierno. Esperemos que con el cambio de régimen que ahora se ha dado en México, se pueda alcanzar no sólo la libertad de expresión, sino el respeto a todos los derechos humanos que permitan a los mexicanos vivir dignamente.