Impulso al deporte

Felipa Nery

Ahora que el gobernador Adán Augusto anunció que su gobierno dará un importante impulso al deporte, recordamos a Platón, quien en relación a la formación del hombre nos planteaba lo siguiente: “El hombre es el conductor de un carro que arrastra dos caballos. Uno de ellos tiene alas y busca continuamente llevar el carro por el camino del cielo, que es de donde procede. El otro, aferrado a la tierra, de donde ha salido, clava en ella sus cascos, como garras. Es preciso que el conductor logre dominar estas dos fuerzas discordes, que tenga en sus manos estas energías contradictorias y que, finalmente, obligue a los caballos a llevar el carro, sin sacudidas, ni choques, hasta el final del camino de la vida.”Para Platón, la educación física era una parte esencial de la educación integral. “La educación es el arte de conducir al niño por los caminos de la razón. Su deber consiste en fortalecer el cuerpo tanto como sea posible y en elevar el alma a su más alto grado de perfeccionamiento”, decía. En su época, los muchachos atenienses acudían al maestro de gimnasia con el fin de que su cuerpo sirviera mejor a su espíritu virtuoso e impedir que la flaqueza física le llevara a la cobardía. La aptitud física se convertía en algo más que un medio de supervivencia, un medio de desarrollo adecuado y armonioso para poder cumplir los designios del cosmos. Qué bueno que el gobernador Adán Augusto tiene entre sus proyectos principales el impulso al deporte de competencias, otorgar becas deportivas y construir centros deportivos de alto rendimiento. Se necesita que nuestros jóvenes se preparen no sólo para adquirir conocimientos en las matemáticas, español, ciencias naturales, etc., es muy primordial e importante cultivar en los jóvenes la fuerza, el coraje, la responsabilidad, la voluntad, y esto sólo se logra a través del esfuerzo que se cultiva con  los deportes de competencia. Preparar a los jóvenes en mente y cuerpo es importante, porque así se les arma para enfrentar la vida que les espera. Sólo un niño, un adolescente y joven que se le cultiva mental y físicamente, puede controlar sus emociones y elegir mejor entre los caminos del bien y el mal, pero sobre todo, prepararse ante las adversidades, aprende a sobrellevarlas y salir de éstas cuando se presentan tempestades. Por supuesto que aunada a este propósito que tiene el nuevo gobierno que ahora tenemos, se debe sumar el compromiso de los padres de familia, porque es una realidad que la educación y formación de los niños y jóvenes, no depende sólo de la escuela, o los maestros, sino que se trata de una triada, en la que interviene el Estado, los maestros y los padres de familia. Hoy existe plena voluntad del gobierno en crear la infraestructura que permite a los alumnos estar en condiciones para prepararlos en mente y espíritu, para ello también se ha dado reversa a la reforma educativa, ahora falta que los padres de familia asuman el papel que les corresponde como guías de sus hijos.