Carreteras y estaciones de metro se encontraban perturbadas este martes de mañana en Madrid y alrededores, a causa de las inundaciones que el lunes por la noche transformaron las calles en auténticos ríos y obligaron a los bomberos a más de 150 intervenciones, según las autoridades.
En la ciudad más afectada en torno a la capital española, Arganda del Rey, las imágenes difundidas por medios locales muestran calles convertidas en torrentes de barro, que se llevaron por delante numerosos vehículos.
Igualmente se formaron enormes montículos por la acumulación de granizo.
No ha habido ningún herido y las intervenciones han sido relativamente normales para una tromba así: para retirar ramas de la vía pública, inundaciones en garajes, sótanos, locales comerciales”, señaló un portavoz de los servicios de emergencia de la región de Madrid.