Y los centros de justicia?

Felipa Nery

Tabasco es una de las entidades del país que ocupa uno de los cinco primeros lugares de violencia contra la mujer, además de estar también entre las que tienen un alto índice de feminicidios. Por lo anterior, el secretario de Gobierno, Marcos Rosendo Medina Filigrana anunció en días pasados que Tabasco contará con cinco refugios para atender a mujeres maltratadas, iniciando de inmediato con dos y los otros tres en el siguiente año. Por ser Tabasco una de las entidades que padece un alto índice de violencia contra la mujer, violencia que va aumentando poco a poco en la familia, hasta llegar a los feminicidios. Desde el inicio de la administración pasada, el gobierno federal destinó recursos económicos a Tabasco para la construcción de un centro de justicia integral para mujeres y se pasaron todo el sexenio buscando un terreno para construirlo, y al final, cuando ubicaron un terreno en el municipio de Nacajuca, finalmente resultó con líos judiciales, por lo que ya iniciada la obra se tuvo que detener y finalmente no se concretó nada, pero sobre todo, por la ineptitud de las autoridades de la Fiscalía del Estado que tenían a su cargo la responsabilidad de la construcción de esta obra a favor de la atención a las mujeres víctima de la violencia. En el mes de agosto de este año, el gobernador Adán Augusto López Hernández decidió declinar en la intención de continuar la construcción de ese centro de justicia para mujeres en el municipio de Nacajuca, por considerar, de entrada, que era inoperante para atender a las mujeres, sobre todo, por la distancia y la dificultad que representaría para las mujeres acudir hasta allá, por lo que anunció que se construirían por lo menos tres centros, en distintas partes de la entidad. Lo que ahora anuncia el secretario de gobierno, Marcos Rosendo Medina, no son los centros de justicia para mujeres, son refugios, mismos que contempla la Ley General de Acceso a una Vida Libre de Violencia para las Mujeres, que deben existir para resguardar a aquellas mujeres que viven violencia dentro de su hogar y que luego de denunciar a su agresor, corren el riesgo de ser asesinadas, por lo que deben de ser resguardada ella y sus hijos en un lugar seguro, donde se cuente con médico general, psicólogo y trabajadora social que pueda atenderlas de forma integral. Están pendientes los anuncios para la construcción de los Centros de Justicia para las mujeres, que no deben ser edificios rimbombantes que requieran de inversiones millonarísimas, sino que deben ser lugares donde exista un fiscal para atender a las mujeres que sufren violencia, médicos legistas, psicólogo, todos, para valorar a las mujeres cuando son víctimas de violencia física, sexual o psicológica y por supuesto, que deben ser lugares de fácil acceso para las mujeres, y si no es posible que exista uno en cada municipio, por lo menos sí uno por región, porque no se puede instalar uno sólo para atender a todas las mujeres del estado, porque se les dificultaría el traslado desde sus lugares de residencia. Esperemos pues, que se concreten estas instancias para apoyar a las mujeres que se animan a denunciar a sus agresores y quieren vivir libres de violencia.