Luis García
El Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil, conocido como Panaut, es el proyecto para la creación de una base de datos que contiene la información de las personas jurídicas que contraten una línea telefónica móvil en México.
El padrón entró en vigor el 16 de abril de 2021 con la publicación de la reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión. El padrón estaría a cargo del Instituto Federal de Telecomunicaciones. Los usuarios y titulares de telefonía móvil deberían de proporcionar para la creación del padrón una identificación, comprobante de domicilio, así como sus datos biométricos.
Sin embargo, en su momento el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), interpuso una impugnación ante la Corte, al advertir que el decreto transgredía los derechos a la vida privada, intimidad, datos personales, identidad e interés superior del menor, puesto que la medida es desproporcional.
Por ello al darse a conocer que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) invalido la totalidad del decreto en mención el organismo autónomo celebró la acción del máximo tribunal en México.
Por lo tanto el gobierno federal no tendrá acceso a toda la información de cada uno de los ciudadanos mexicanos. Y decimos lo anterior porque el objetivo de ese padrón era ayudar a las autoridades mexicanas a la prevención y persecución de delitos. Pero además a controlar y poder vender la información tan importante que ahí se tendría, violando la Ley de Datos Personales que ya existe.
FIN AL CUBREBOCAS
Pues nada que el subsecretario de Salud Hugo López Gatell, dio a conocer ayer una serie de temas relacionados al Covid, donde dice que “México ya está cerrando el ciclo epidémico, transitando a la fase endémica”, por lo tanto se acaban los informes diarios y estadísticas de como va la enfermedad, pasando a ser de manera semanal. Dijo además que no es “imprescindible” utilizar el cubrebocas. Mientras tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS), hacia un llamado a los países a no bajar la guardia y no abandonar las pruebas para poder continuar observando la evolución que tenga el virus.
Observo contradicción entre la primera información y la segunda. Una visión es lo que el organismo mundial trae y otra lo que el señor López Gatell piensa junto con todo sus asesores en materia del virus. De todas formas es necesario informar a la sociedad que ciertamente los números de contagios han bajado y por lo tanto los decesos.
Pero debemos ser precavidos y no echar las campanas al vuelo. La información de López Gatell no es mala, pero debemos tomar todas las precauciones. Así que celebremos el fin del cubrebocas que por mucho tiempo nos dio un gran servicio, pero seamos cautelosos y pongámonos todas las vacunas de refuerzo que se permita, nunca es malo. Más vale prevenir que lamentar.
DE SALIDA. Exhibida la que les dio a la mayoría de sus compañeros legisladores el diputado morenista Jorge Bracamontes al exhibir que de los 35 que integran la legislatura, sólo 8, firmaron un documento para donar sus órgano en caso de algún accidente. Pero sobre todo como personas de buena fe. La realidad es que la sociedad mexicana, pero aún más la tabasqueña no está preparada para la donación de órganos, el hecho de ser representantes populares, no significa que tengan la capacidad educativa ni cognitiva del significado de donar sus órganos a personas desconocidas. Para estas personas es como si tuvieran que ser cremados, en lugar de ser enterrados y su cuerpo sea consumido por los gusanos. Suena algo burdo, pero es la realidad, no hay la costumbre ni de cremarnos, ni de dar nuestros organismos. No es que sean malas personas es que simple y sencillamente no es tema…En caso de que se apruebe una iniciativa al Código Civil para el Estado de Tabasco, donde de común acuerdo por los padres, el niño o niña puede llevar primero el apellido de la mamá y luego del padre o como siempre ha sido. La gran pregunta es ¿cuántos padres querrán que su apellido desaparezca…
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